En las primarias  del PSUV, Eudomar Santos votó “entubado” por los candidatos de Diosdado  Cabello.Por eso me asombró saber por boca suya que en las parlamentarias del domingo pasado, mi amigo Eudomar votó …¡por Alfonso Marquina, de Un Nuevo Tiempo!
Hace pocos meses –en  plena Campaña Admirable de Ramón Guillermo Aveledo– topé con Eudomar Santos en la cola de quienes tramitamos con prudente antelación la pensión de vejez.
Reseñé el encuentro en estas misma páginas porque de  Eudomar no sabía nada desde hacía diecisisete años. Sumaricé su trayectoria de esta manera: “Desempleado crónico sin escolaridad completa,  Eudomar se contaba [ en 1992, cuando trabajamos juntos en una telenovela] todavía entre la masa de votantes de la Accción Democrática de Lusinchi y Blanca Ibáñez.
Más allá del providencialismo que encierra su santo y seña –“como vaya viniendo, vamos viendo”– , Eudomar no adhería a ningún sistema de pensamiento ni ideología política. Desde tiempo inmemorial, Eudomar fue cliente de la maquinaria adeca. Pero ya para entonces estaba cansado de que para todos hubiera menos para él.
Se hizo, pues,  activista del Partido Oportunista de don Chepe Orellana, con un ojo puesto en la suculenta Lucha, la inescrupulosa amante de aquel, y el otro ojo en el cargo que le iban a dar –y no le dieron – como supernumerario de una alcaldía. Terminó votando por Chávez en el 98, según me dijo, para que ni Chepe Orellana ni Carmelo Lauría volviesen a burlarse de sus aspiraciones.
Eloína Rangel y Eudomar se separaron hace años –  ella, hasta donde sé, vive ahora en el South West –la “sagüesera”– de Miami, con un medico cubano, desertor de “Barrio Adentro”.
Casi sesentón ya, Eudomar vive hoy arrejuntado con una gocha microempresaria del rubro “comida rápida”,  dueña de una pequeña cadena de perrocalenteras en el eje Guarenas-Guatire.
Eudomar milita desde su fundación en el PSUV. Ha sido beneficiario de algunas de las misiones y me contó que entrena los fines de semana en la milicia para defender hasta la última gota de su sangre “el proceso”. Pero su corazón está irreductiblemente casado con el rebusque de raigambre adeca.
En las primarias  del PSUV votó “entubado” por los candidatos de Diosdado y no por los de Chávez.”
Por eso me asombró saber por boca suya que en las parlamentarias del domingo pasado, mi amigo Eudomar votó …¡por Alfonso Marquina!
—    Es que yo vivo en Guarenas pero nunca me cambié en el registro del CNE y me toca votar en Altos Mirandinos– me dijo, característicamente,  como si eso fuese una explicación.
—    Negro, perdóname, pero en ese circuito te tocaba darle el voto a Aurora Morales.
—    Renovarse o morir, pana.
—    Si no recuerdo mal, votaste por Aurora en las primarias del PSUV. Hace sólo un ratico.
—    ¿Ah ,sí? ¿Y como tú sabes? El voto es secreto– repuso soltando una risotada.
Nuestro encuentro se dio en una clínica  caraqueña donde un amigo suyo – me parece que uno de sus jefes inmediatos en el Psuv– se reponía del devastador ACV que sufrió la madrugada del lunes cuando supo los resultados del CNE.
Yo había ido a que me pincharan para un examen de sangre –desde que el doctor Alexis Bello me puso una válvula aórtica  de carbón pirolítico debo chequear mis niveles de anticoagulante cada cierto tiempo– y, no teniendo nada mejor que hacer, invité a Eudomar a una conversación en la catedral.
—    Así que votaste por Alfonso Marquina– dije, por decir algo,  cuando estuvimos ya frente a sendas cerbatanas en un figón de La Candelaria.
—    Tremendo tipo. Le ha echado un camión de bolas. Con tal de que no se olvide de la gente…
—    Díme una vaina, Eudomar: ¿te saliste del Psuv?
—    No, ¿porqué?
—    Bueno porque  Marquina es de Un Nuevo Tiempo…
—    Para votar por Marquina no había que puyar la pantallita de Un Nuevo Tiempo. Yo puyé las de AD.
—    Igual que yo en Prado de María. Sigo votando en el Colegio Santa Luisa, al ladito de la iglesia de La Milagrosa.
—    ¿Y por quién votaste?
—     Te estoy diciendo que puyé también los dos óvalos de AD: tengo un oscura culebra con Un Nuevo Tiempo: demasiado maracuchos avispados, demasiados exmasistas.
—    ¿Y quién era tu candidato allí?
—     Ramón López.
—    ¿Y ese quien es ?
—    Ni idea, caballo. Jamás lo he visto ni en retrato. Un factor importante de la unidad, supongo. Pero no me has terminado de explicar porqué votaste por Marquina siendo tú del Psuv.
—    Soy del Psuv pero eso no es un fatalidad. Para mi los partidos son como unos zaguanes, mi llave. Uno se mete  en ellos mientras escampa pero eso no tiene que ser para toda la vida. También hice campaña por Lusinchi y me dejé de eso. “Por ahora” soy chavista.
—    “Sólo los tontos no cambian de opinión”.
—    Eso es correcto.
Como cabía esperar, las razones de Eudomar son las de tantos chavistas que se abstuvieron  o votaron “cruzado” o votaron nulo o votaron    por los candidatos de la MUD o simplemente no salieron a votar: Pudreval, los apagones, la inflación, las corruptelas en todas las escalas, desde Pdvsa hasta los Consejos Comunales y, last but not least, la matazón de gente. El arraigado uso venezolano de castigar con el voto le viene de sus tiempos de adeco. La venganza del indio viene siempre agachadita.
Me quedó claro que la capacidad de intimidación del Psuv sobre la administración pública ha decaído a niveles alarmantes para los asesores cubanos del régimen.
—Los cubanos no saben de elecciones, pana. Nunca han hecho una. Y si los expertos en averiguarte el voto son como los de Corpoelec, van a saber que voté por Marquina el dia después que pierda Chávez en 2012. Yo el lunes me presenté en el Minipopo ese donde trabajo y mostré mi dedito morado y fuera cacho.
Eudomar, sin embargo, no da por hecho la derrota de Chávez en 2012. Según él, las focas pueden  todavía otorgarle poderes omnímodos aprobando  una habilitante que le permita cambiar las reglas a su medida. Abordamos entonces el cantinflérico sofocón de Chávez ante la “preguntica” de Andreína Flores y  Eudomar compartió conmigo el chascarrillo que alguien le pasó en mensaje de texto: según las nuevas reglas del béisbol profesional dispuestas por el CNE para la campaña que se avecina: Si Magallanes anota una carrera en el primero, otra en el tercero y otra más en el sexto y luego Caracas anota siete en el noveno…gana Magallanes porque haber ganado  mayor número de innings.
También nos reímos de Julio Borges y la atoradísima postulación que hizo de Capriles Ranchosky.
Y ya ante tema tan extemporáneo, Eudomar me preguntó a quién veía yo como candidato para echárselo a Chávez en 2012:
—    ¿María Divina o Ramón Guillermo?
—    ­No sé, caballo: como vaya viniendo  iremos viendo