Los colectivos paramilitares asesinos
14.03.2014
09:43 AM
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Según Wikipedia "un colectivo es un grupo de personas que comparten objetos de interés o que trabajan juntos, pero que no necesariamente tienen un objetivo en común. Se caracterizan por compartir y ejercer poder político y social, y tomar decisiones basados en el consenso y principios igualitarios. Aunque un colectivo puede buscar beneficios económicos, esto no es una condición definitoria, lo cual lo diferencia de una cooperativa.
Un colectivo también puede estar conformado por individuos de diversas motivaciones, pero al compartir un mismo ambiente para vivir, ya sea una estructura social o una zona, estos pasan a formar parte del grupo y por ende, de la sociedad.
La consciencia colectiva es un término creado por el teórico francés Émile Durkheim, que describe cómo una comunidad llega a compartir valores comunes".
Se puede decir que esta es una definición que enmarca a un gran número de organizaciones sociales que nacieron antes y durante el gobierno de los Castro en Venezuela. Los hay que se dedican al trabajo cultural, teatral, cine, educativo, folklórico. Los hay para la actividad deportiva o musical. También para debatir política o preservar los valores de un barrio o una urbanización. En realidad un colectivo no es una organización nociva, aunque cuando hablamos de Venezuela, Chávez, Maduro y los Castro, la cosa cambia radicalmente. Hay mucho colectivos. Calculan que unos 9.000 en todo el país, pero hay un sector que no está compuesto por colectivos propiamente. Se esconden ahí, eso sí. Se disfrazan de colectivos sociales, pero en realidad son matones a sueldo, son mercenarios. Y también hay bastantes. Información extraoficial ubica el número de grupos paramilitares que usan los colectivos para esconder su verdadero fin en unos 80.000 mercenarios agrupados en unos 1.800 grupos armados que, como decíamos, se hacen llamar colectivos.
Estos matones que han salido siempre a atacar a los civiles han perdido la pena y están actuando sin límite alguno. En tiempo de Chávez golpeaban, amenazaban, atracaban, rodeaban, amedrentaban, pero muy de vez en cuando mataban. Hoy la muerte a manos de estos malandros es habitual y a la vista de todo el mundo. Sin pena ni cuidado. Los motorizados llegan disparando. De esto sobran testimonios, denuncias. Muchas de ellas constan en escritos que reposan en el Ministerio Público. No decimos nada nuevo. Esto es noticia conocida y pública. Sobran los documentos gráficos, videos, fotografías. Pero no pasará nada pues son organizaciones que trabajan amparadas en la red oficial paralela a la institucional que tampoco funciona. Lo dijo claramente la defensora del pueblo: sobre los colectivos no tengo nada qué decir. No los he visto. El que tenga algo qué mostrar que me lo mande. Así se despachó este tema Y así se seguirá despachando. Los venezolanos deben tener claro que en el país desde hace muchos años los Castro instauraron una dictadura que es sangrienta cuando lo necesita, pero que siempre está ahí controlando todo. Desde los tribunales hasta las divisas. No hay grietas. Solo vean como Jorge Arreaza, flamante vicepresidente por mandato divino y del más allá, declaró que los colectivos han hecho un gran trabajo hasta ahora. Mire usted, pues.
¿Qué hace un paramilitar mientras no está agrediendo gente? Es mototaxista, trabaja en los ministerios, malandrea. Muchas cosas que solo quienes manejan estas redes lo saben. Aunque un Alcalde recién electo hace años encontró la nómina completa pagada por el despacho que asumía. Pero ahí no pasó nada.
Así que cuidado. Son muy malos.
Twitter: @ejrl
Un colectivo también puede estar conformado por individuos de diversas motivaciones, pero al compartir un mismo ambiente para vivir, ya sea una estructura social o una zona, estos pasan a formar parte del grupo y por ende, de la sociedad.
La consciencia colectiva es un término creado por el teórico francés Émile Durkheim, que describe cómo una comunidad llega a compartir valores comunes".
Se puede decir que esta es una definición que enmarca a un gran número de organizaciones sociales que nacieron antes y durante el gobierno de los Castro en Venezuela. Los hay que se dedican al trabajo cultural, teatral, cine, educativo, folklórico. Los hay para la actividad deportiva o musical. También para debatir política o preservar los valores de un barrio o una urbanización. En realidad un colectivo no es una organización nociva, aunque cuando hablamos de Venezuela, Chávez, Maduro y los Castro, la cosa cambia radicalmente. Hay mucho colectivos. Calculan que unos 9.000 en todo el país, pero hay un sector que no está compuesto por colectivos propiamente. Se esconden ahí, eso sí. Se disfrazan de colectivos sociales, pero en realidad son matones a sueldo, son mercenarios. Y también hay bastantes. Información extraoficial ubica el número de grupos paramilitares que usan los colectivos para esconder su verdadero fin en unos 80.000 mercenarios agrupados en unos 1.800 grupos armados que, como decíamos, se hacen llamar colectivos.
Estos matones que han salido siempre a atacar a los civiles han perdido la pena y están actuando sin límite alguno. En tiempo de Chávez golpeaban, amenazaban, atracaban, rodeaban, amedrentaban, pero muy de vez en cuando mataban. Hoy la muerte a manos de estos malandros es habitual y a la vista de todo el mundo. Sin pena ni cuidado. Los motorizados llegan disparando. De esto sobran testimonios, denuncias. Muchas de ellas constan en escritos que reposan en el Ministerio Público. No decimos nada nuevo. Esto es noticia conocida y pública. Sobran los documentos gráficos, videos, fotografías. Pero no pasará nada pues son organizaciones que trabajan amparadas en la red oficial paralela a la institucional que tampoco funciona. Lo dijo claramente la defensora del pueblo: sobre los colectivos no tengo nada qué decir. No los he visto. El que tenga algo qué mostrar que me lo mande. Así se despachó este tema Y así se seguirá despachando. Los venezolanos deben tener claro que en el país desde hace muchos años los Castro instauraron una dictadura que es sangrienta cuando lo necesita, pero que siempre está ahí controlando todo. Desde los tribunales hasta las divisas. No hay grietas. Solo vean como Jorge Arreaza, flamante vicepresidente por mandato divino y del más allá, declaró que los colectivos han hecho un gran trabajo hasta ahora. Mire usted, pues.
¿Qué hace un paramilitar mientras no está agrediendo gente? Es mototaxista, trabaja en los ministerios, malandrea. Muchas cosas que solo quienes manejan estas redes lo saben. Aunque un Alcalde recién electo hace años encontró la nómina completa pagada por el despacho que asumía. Pero ahí no pasó nada.
Así que cuidado. Son muy malos.
Twitter: @ejrl
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