Chávez sigue al mando, pero desprovisto de condiciones para trabajar
A menos que todo esto sea una treta, el general en jefe de la llamada "segunda independencia" de Venezuela no estará en plenas facultades físicas durante las festividades del magno evento del próximo 5 de julio. Si Chávez está seriamente quebrantado, como se le ha informado al país, la celebración del bicentenario -de la que saldría vigorizada su imagen de hombre fuerte- no resultará como estuvo previsto. El imponderable no puede serle más infortunado: una ceremonia como ésta es el sueño dorado de un hombre de la vanidad del presidente, quien, por largos años, ha perorado acerca de esta gran gala, en la cual se veía a sí mismo ejecutando el mejor, el más histórico, de sus performances.
Sólo sus médicos saben si la humanidad enferma del comandante se encontrará a tono dentro de los 18 días que faltan para la solemne fiesta patria, desde cuyas tarimas -se suponía- debía emerger, imponente e imbatible, el heredero del Libertador Simón Bolívar. La trama, sin dudas, formaría parte de su campaña electoral, a la que ahora afrontará, aquejado de la dolencia de que padece y de las otras tantas que el cotilleo general le adjudicará, siempre a sabiendas -cuando no intuyendo- que la verdad pura y transparente no es el rasgo más distintivo del "proceso".
El tiempo ha pasado y nadie puede negarlo: ni siquiera el cuerpo adolorido del jefe bolivariano, cuyos padecimientos -persistentes- no sólo realzan la juventud de quienes hoy representan sus mejores competidores en el campo de la oposición. Tan visible como ese inoportuno contraste, es el nerviosismo del paisaje chavista, donde reinan los temores frente a la posibilidad de que, ahora sí, termine tomando raíces firmes la idea -fatal, por la evidente ausencia de un "outsider rojo"- de que el comandante ya no da para más; de que, ni aún teniendo las mejores intenciones, podrá echar hacia adelante sus viejas y nuevas promesas. En un país donde sólo existe Chávez -y en el que nadie reconoce brillos ni aptitudes en su tren ministerial-, es natural que surjan sospechas acerca del destino incierto de sus ofertas más urgentes (¡pobre Misión Vivienda¡) e, incluso, de la inconveniencia de su reelección.
El hecho, a juzgar por los tartajeos temblorosos de sus ministros, ya ha de estar siendo abordado por sus geniales y atinados propagandistas, quienes se afanan en hacer ver que aquí no pasa nada, mientras adelantan los preparativos de lo que -obligación por circunstancia-, será el regreso triunfal del heredero de Bolívar. La oposición, entretanto, camina sobre sus propios pasos debatiendo sobre del "vacío de poder", sin entender que Chávez sigue al mando, pero desprovisto de condiciones para trabajar. Por eso, sólo una consigna vale para este momento: "Déjenlo descansar"... que el hombre está achacoso y obviamente agotado.
En Twitter @argeliarios
Con absoluta razón Venezuela ha quedado para ser chuleada por unos pillos
Eso simplemente es Hugo Chávez, pero se impone pensar en la máxima que asegura que los pueblos tienen el gobernante que se les parece... porque seamos honestos, revisemos la historia de otros países y veamos cuántos han tenido déspotas o tiranos orgullosos de entregarse en los brazos de extranjeros y además lograr -sin esfuerzo alguno- que a la gente le resulte cómico eso.
En la noche del domingo -y esto sólo como anécdota para reafirmar lo que digo- apareció el "Benemérito" desde su "Madre Patria" contando como una gracia que "... hasta Fidel Castro le dio su diagnóstico y le ordenó descansar", después continúo desnudando sin pudor su falta de dignidad al decir "Estoy desobedeciendo a Fidel con esta llamada. Él dice que tengo que dormir temprano"... y desde ese momento -cándida soy- esperé que algún "Figurón" opositor de esos que quieren que votemos por ellos, saliera contundente a expresar asco ante tamaña aberración... ¡Todavía espero!
Y es que con absoluta razón Venezuela ha quedado para ser chuleada por unos pillos y para ser motivo de burla de todo el que calibre nuestra mediocridad. Fíjense nomás que finalizando mayo el mismo Chávez habló de una dolencia que lo aquejaba, de sus dolores por una pérdida del líquido sinovial en su rodilla izquierda, y dijo que tendría que ser operada y estaría fuera de circulación durante tres meses... Pero al verlo en gira, y con una sonrisota de oreja a oreja días después del anuncio, supusimos que el "Benemérito" no necesitó de la intervención quirúrgica y tampoco guardó reposo... O sea, que era otro cuento que dio pie a que el astuto y cínico hijo del narcotraficante conocido como el "Manco Correa" se refiriera burlón al "Eje de la rodilla dañada", que según el ecuatoriano, integran él, Evo Morales y ahora Chávez. Y como también el Eje putrefacto existe, allí planifican las acciones contra un pobre pueblo de pendejos que sonreídos se hacen los locos cuando un militar sinvergüenza y abyecto con nuestra plata contante y sonante acompaña su grito de ¡Gracias por todo Fidel!
ebruzual@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario