Somos seres espirituales en un cuerpo físico. Nuestra experiencia en este planeta es posible gracias a los cuerpos que vamos habitando durante nuestras muchas vidas. Cuando encarnamos, lo hacemos en un “recipiente” que tiene historia. Y esa historia nos afecta y condiciona.

¿Cómo nos afectan hoy nuestros ancestros y vidas pasadas?

¿Por qué en Conciencia Celular trabajamos sobre información ancestral e información de vidas pasadas?

¿Pueden afectarnos hoy los episodios de nuestras vidas pasadas y las experiencias de nuestros ancestros?

Somos seres espirituales en un cuerpo físico.
Nuestra experiencia en este planeta es posible gracias a los cuerpos que vamos habitando durante nuestras muchas vidas.
Cuando encarnamos, lo hacemos en un “recipiente” que tiene historia. Y esa historia nos afecta y condiciona.
Los cuerpos físicos en los que nuestras almas encarnan, son producto de un linaje ancestral.
Este linaje se remonta a la Tierra misma, a todas las formas de vida que habitan en él, a toda la historia de la raza humana y por supuesto a los integrantes de las familias a las que pertenecemos geneticamente.
Al nacer, recibimos todo este linaje ancestral que lleva tambien consigo las memorias celulares acumuladas por cada una de estas formas de vida.
En cada tiempo de vida, guardamos profundamente en nuestra memoria celular, partes de nuestro dolor emocional y mental, de nuestros sufrimientos, nuestros patrones de pensamiento (positivos y negativos), nuestras creencias, nuestras limitaciones y tambien nuestras capacidades. Esta memoria pasa a futuras generaciones.
La información ancestral , memorias celulares incluidas, se expresa en nuestro ADN. Instalando potenciales dones o limitaciones en nosotros.
Solemos asumir estas limitaciones como propias, y de ese modo algo que no nos es estrictamente propio y que generalmente desconocemos, puede llegar a inhibir nuestras vidas, nuestras emociones, nuestros patrones de pensamiento y nuestras creencias.

Por otro lado tampoco llegamos al cuerpo como seres puros.
El alma que entra trae consigo su propias memorias, sus habilidades y tambien el karma acumulado en vidas anteriores. Esta información tambien se imprime en nuestro ADN.

Muy probablemente el alma ha vivido diferentes vidas en el planeta. Y en todas estas vidas, ha dejado en la memoria celular de los cuerpos en los que habitó, huellas de dolor emocional y mental , de sufrimiento, patrones de pensamiento (positivos y negativos), creencias, limitaciones y tambien logros y destrezas.
Esta memoria, guardada en las células, pasó luego a las nuevas generaciones , afectándolas como nosotros nos vemos afectados por la memoria celular de nuestros ancestros.
Por lo tanto es posible que haya personas en el mundo (que a veces podemos ser nosotros mismos), teniendo que lidiar con temas que dejamos inscriptos en la memoria celular de los cuerpos que habitamos anteriormente.

En esta vida también estás guardando información en tus células.
Has lo posible para que sean memorias positivas y enriquecedoras para facilitar que tus descendientes puedan tener una mejor vida en el futuro.

¡Que tu memoria celular conlleve registros positivos!

Como parte de nuestra ascensión, necesitamos sanar nuestra línea ancestral y liberarnos de los efectos de nuestra memoria celular heredada.

“Conciencia Celular” nos ayuda a eliminar estos patrones, creencias, procesos de pensamiento y limitaciones sean o no de nuestra propia creación.

Y más aún, sanado tu memoria celular ancestral – también estás sanado a tus descendientes, a tus ancestros y a las almas que habitaron los cuerpos de tus antepasados , y que ahora están tal vez, en otro cuerpo viviendo otra vida.

Patricia Sahade