Introducción
Conceptualmente, la “Biografía” es una forma de reconstruir la historia partiendo de un personaje, sus virtudes o defectos en un determinado tiempo y espacio. Esta disciplina se puede catalogar como una de las formas más antiguas y precisas para construir un determinado acontecer en la historia de la humanidad.
No es del todo clara la comprensión en los postulados y definiciones de algunos investigadores, al considerar este género como “Secundario”, afirmando que los hechos históricos se puntualizan por el producto y consecuencia de acontecimientos. Estas situaciones o aconteceres no son otra cosas que el interés de un pensamiento individual, que, unidos a similares lograron concretar un ideal. El resultado de la ideología en el movimiento de un determinado grupo de la sociedad ha sido lo que ha cimentado y marcado las páginas de la historia.
La “Biografía” como historia o literatura.
Biográficamente se destaca la descripción sobre la actuación del personaje, como se acota con anterioridad, en un tiempo y espacio, tratando de aportar los datos de una manera objetiva sin llegar a una forma o estilo literario determinado, aunque la investigación biográficano se desprende de una forma literal establecida, la manera de escribir una biografía no debe estar sometida a una camisa de fuerza constituida por el lenguaje, ya que, cada pensamiento, actuación y resultado sobre la persona estudiada, puede convertirse en un detonante para nuevas investigaciones y hasta modificar situaciones y creencias dadas como verdaderas durante centurias.
La selección del personaje.
Los motivos para la selección de un biografiado varían según los episodios que se deseen destacar, se abre un abanico de temas, cualidades, consecuencias, inicios, personajes destacados en cientos de disciplinas, médica, artística, religiosa, política, militar, pedagógica, historiográfica, tantas como facetas diversas tiene la personalidad, desarrollo y actuación del ser humano. Está en el ánimo del investigador, cuál de esos aspectos desea descubrir o resaltar sobre una persona, sin emitir juicios sobre lo positivo o negativo que haya sido su actuación ante diversas situaciones estando en vida.
El personaje en cuestión. Síntesis biográfica.
Francisco Antonio Rísquez Alfonzo 1856 – 1941
Hijo de Jesús María Rísquez y Fernanda Alfonzo, nació en Juan Griego, Estado Nueva Esparta el 10 de octubre de 1856. Recibió el título de Bachiller en Filosofía y Letras en la Universidad de Caracas en 1870a los trece años de edad, obteniendo posteriormente el título de Doctor en Medicina de la misma Universidaden el año 1876, contando veinte años de edad. Además de la medicina, se desempeñó en otras áreas como la política, siendo Diputado a la Legislatura del Estado Nueva Esparta cuando contabacon 21 años de edad.
Después de ejercer durante varios años la medicina en su estado natal, continúa su vida profesional residenciándose en Petare (Caracas)en el año de 1882. Durante seis años ejerció en diferentes zonas del Estado Miranda y la Isla de Margarita. Entre los años de 1891 y 1901, desempeñó diversos cargos en esta rama, representando a Venezuela en Congresos Internacionales, cumpliendo además con una labor periodística, creando diversas instituciones médicas tales como la Sociedad de Médicos Cirujanos junto a Luis Razetti y Sociedades de esta misma índole, además del Hospital de Niños Pobres de Caracas. En 1889se desempeñó como Vice-Rector de la Universidad Central de Venezuela y ejerció interinamente el cargo de Rector de la misma Universidad. En 1896 se le encomienda la redacción de Código de Instrucción Pública, así como el Código Farmacéutico Nacional.
En el Servicio Exterior se desempeñócomo Cónsul General de Venezuela en Madrid para el año de 1901, obteniendo en el año 1902 el título de Médico de la Universidad de Madrid. Fundó en Málaga un Centro Policlínico así como la Liga Antituberculosa.Perteneció y fue y Miembro correspondiente de la Real Academia de Medicina de Madrid, de la Academia Médico-Quirúrgica, de la Sociedad Española de Higiene, de la Sociedad de Ciencias Físicas y Naturales, Miembro del Consejo Supremo de la Cruz Roja, entre otros. Para 1908 es nombrado Cónsul en Barcelona y Encargado de Negocios en España, retornando a Venezuela en el año de 1910.
Una vez en el país, ejerce la Cátedra de Patología General, redactando en el año 1913 la Memoria Oficial sobre: “El Paludismo en Venezuela”. Para el año de 1916 fue electo Presidente de la Academia Nacional de Medicina. Director y reformador de la Escuela de Medicina en el año 1920, considerado como el creador de la higiene del trabajo ya que en 1922 fue el primero en iniciar conferencias públicas en centros de obreros. En el año 1935 fue nombrado Rector de la Universidad Central de Venezuela y en 1936, fuedeclarado Huésped de Honor del Congreso Médico Panamericano de Río de Janeiro (Brasil).
Distinguido con el título de Ciudadano Benemérito del Distrito Federal. Autor de innumerables artículos científicos, médicos y libros especializados en los que cabe destacar: Patología Interna y Medicina Legal, Lecciones de Cirugía General, Farmacopea Venezolana, Estudios Higiénicos, Patología General, Higiene Militar, El emigrante a las regiones tropicales, Mi labor científica, Mi labor pedagógica entre otros. Fue fundador, entre otras, de las siguientes instituciones: Hospital de Niños Pobres, actual Hospital J.M. de Los Ríos, Cruz Roja Venezolana y Escuela de Enfermeras. Poseía 18 títulos científicos y 26 títulos honoríficos, diversas condecoraciones y reconocimientos nacionales e internacionales. Falleció en Caracas el 10 de julio 1941decretándose duelo oficial y nacional.
En esta investigación biográfica, se ha tratado de destacar un aspecto que aunque poco conocido en la persona del Doctor Rísquez, se asoma en todas las lecturas realizadas, desde la autobiografía del personaje, así como en la biografía consultada, diversos artículos, discursos del personaje como dedicados al mismo, opiniones diversas en prensa, revistas especializadas desde el siglo XIX hasta la actualidad, incluyendo publicaciones en la internet.
Ha despertado la atención, el aspecto “humano y social” del Dr. Rísquez, por ello junto a su extensa hoja de vida, vale destacar y citar pasajes y frases emitidas por connotados oradores, discípulos y conocidos del Dr. Rísquez, que encierran una naturaleza humana que sobrepasa más allá de la destacada labor médica y científica, la preocupación por el bien estar, educación y desarrollo humano, siendo el valor y pasión por la “docencia”, la enseñanza desde los primeros niveles de la educación a los estudios superiores de la Medicina e investigación científica, traspasando fronteras, convirtiendo su la labor educativa en un “apostolado” de vida.
Leamos de su propia autobiografía la presentación, destacando de la segunda palabra del párrafo, la esencia y verdadero significado de la misma:
Nací humilde en un pueblo modesto de la apartada isla de Margarita, el 10 de octubre de 1856. Mis padres modelados en las costumbres casi patriarcales de los pueblos alejados del bullicio mundano, consagraron sus afanes a levantar al único varón de la descendencia, último de la serie, y una vez cumplido el periodo de la escuela, que grabó a la antigua usanza las primeras letras en el cerebro del niño, ya soñaron con darle una carrera, y se fijaron en la eclesiástica, para aquellos tiempos y lugares, la carrera ideal. (Rísquez, 1997; 279)
El sentido y significado real de la “humildad” se convierte en intangible concepto acuñado desde la infancia, el cual marcará el desarrollo del personaje bajo este principio.
Su maestro en Juan Griego, el General Andrés A. Level, convence a los padres de Rísquez para que le permitan viajara Caracas bajo su tutela doméstica y la dirección científica del Doctor Gerónimo E. Blanco, concluye en mayo de 1870 a los 13 años de edad, sus primeros estudios recibiendo el grado de Bachiller en Filosofía y Letras, ocupando el primer puesto entre 60 compañeros de estudio.
Resume Rísquez (1997) este viaje de la siguiente manera:“Héteme aquí viajando hacia Caracas, que para aquella época era más que decir viaje a la Meca de Mahoma.”(p. 279)
Se anota que para esa época de 1870 el viaje de Margarita a la Guaira se hacía entre tres y cinco días como término medio, para 1898 por los adelantos del trasporte naval, se redujo a un día la travesía.
Inicia Francisco Antonio Rísquez sus estudios de medicina en la Universidad de Caracas, bajo la tutela de los antes mencionados y del Doctor Jesús Muñoz Tébar, recibiendo el título de Doctor en Medicina para el año de 1876 a los veinte años de edad.
Considera Rísquez(1997) lo siguiente:
He nombrado a tres hombres, porque, después de mis padres, fueron ellos sin duda, quienes inspiraron mis inclinaciones e imprimieron el sello a mi carácter. A ellos debo la severidad con que acostumbro juzgar mis propias faltas y las ajenas, para amargura de mi vida: de ellos saqué ese idealismo ya incurable, rayando en lo utópico, que me mantiene en una aspiración nunca satisfecha; de ellos aprendí ese amor a la enseñanza, que ha ahogado en mí todo apego a los bienes materiales; y por ello conservo esa tranquilidad con que dejo conocer mis intimidades, lo cual me coloca, según dicen mis críticos, en la desigual posición de quien en el tapete del mundo pone sus cartas boca arriba, ante los demás que esconden o disimulan sus juegos. (p. 280)
Los ideales de moral y superación espiritual como factor esencial de su pensamiento, auto exigencia por lograrlo, la tranquilidad producto de esto ideales y el amor a la enseñanza ante cualquier otra prioridad de vida. Induce a concluir en estas reflexiones del biografiado los valores morales y crecimiento de los mismos ante cualquier otra circunstancia de vida.
Es por ello que se copia de sus palabras, frases que aumenta este descubrir en la íntima y abierta personalidad del “Sabio”:
Ya que no fui cura, si no hubiese sido Médico, habría sido Maestro de Escuela. Pero esta afición ha sido como un relleno en mi armazón profesional, una especie de complemento a las tareas de mi actividad, que otros han llamado multiforme, pero que no es en realidad sino una sola cosa, estudiar para enseñar. Donde quieraque un grupo de niños o de adultos me han pedido lecciones o explicaciones, en dar las cuales declaro que siento un verdadero placer. (Rísquez, 1997; 280)
Transmite el texto, no solo la pasión por la docencia, se descubre en sus palabras algo de mayor importancia y relevancia en la labor docente, la pedagogía, ya que, cuando se puede relacionar la inquietud de un niño, adolescente o adulto en su afán por saber,llega al nivel de los mismos asumiendo la “humildad” del saber cómo virtud.
Leamos a continuación, partes del discurso pronunciado por el Doctor Francisco Antonio Rísquez, el 27 de abril de 1921, a los 65 años de edad, en el “Discurso de Gratitud” en el acto de las Ofrendas, con que festejó Venezuela las “bodas de Oro Docentes” del Doctor Rísquez (1997).
Señor Presidente de la República.
Generosos amigos.
Auditorio Benévolo:
En todo tiempo, para todas las representaciones de la Historia, para todo ideal de perfeccionamiento humano, ha sido necesario un símbolo. Tres franjas de cualquier tela burda avivan en nosotros el amor de la Patria, y tras el señuelo de su iris sugestivo, se arranca el paso hacia las cumbres de la Gloria y va el aliento hasta lo inverosímil del sacrificio. Y a nuestra misma religión, al Verbo Santo que sabe trasmutar un mísero precito en un Bienaventurado de lo Eterno, le bastan como emblema dos frágiles astillas, que se cruzan para irradiar hacia los cuatro vientos del orbe los resplandores del Amor Infinito.
De análoga manera, hoy, cuando un sacudimiento insólito conmueve las entrañas de Caracas, un aura de protección al esfuerzo se eleva, cargado de promesas, del alma de nuestro pueblo y un espíritu de recompensa al trabajo se cierne, como un soplo creador, sobre la haz de Venezuela, se escoge como símbolo el pendón desteñido de mis luchas, mi pobre bandera, formada, a imitación del iris de nuestras libertades, por el lampo dorado de una aurora surgida de una noche que no tuvo estrellas, un girón de zenit que apenas mintió un cielo y el rosicler de ocaso de una vida que se oculta.
Y mis brazos abiertos, arrancando del pecho, todo él henchido de gratitud y de cariño, simbolizan la cruz que el deber lleva a cuestas por la calle de amarguras de la vida, señalando en ambos polos de la tierra, cuáles son los caminos por donde se llega a la apoteosis del trabajo.
Demuéstrase hoy con resonante prueba, que ser maestro es un título de honor indiscutible; que haber tenido discípulos, es haberse creado de por vida una atmosfera de afecto y consideraciones; que haber vivido entre niños y entre jóvenes, canjeando, en perenne comunión, savia vieja de experiencia, con jugo nuevo de vitalidad germinativa, es haber asegurado la única vida que no se extingue con la muerte, sino que se perpetúa con las generaciones sucesivas, en una de las formas más apetecibles de la inmortalidad. (pp. 86-87)
Lo expresado en este “Discurso de Gratitud”, encierra Rísquez en una estética de pensamiento y forma literaria el valor de Dios, de la Patria y de la Educación, demostrando en una brillante y poética analogía su personalidad franca y humilde factor cautivador de las audiencias al saber expresar de manera clara y diáfana su reflexión de vida y de su vida.
Se recogen seguidamente, diversos juicios emitidos sobre la personalidad del Doctor Rísquez. Se resaltan las frases o palabras claves que han sido motivo de esta apreciación sobre Francisco Antonio Rísquez en el aspecto humano y social, los cuales fueron recogidos por Herrera (1977).
Víctor M. Ovalles: “Como médico ha sido docto; como maestro eficaz; como hombre de letras brillante; y como elemento social, muy útil.” (p. 55)
Carlos Enrique Paz Soldán: “Yo he de dirigir un saludo cordial y expresivo al venerable patriarca de la Medicina venezolana…cuya vida fecunda e intensa es un ejemplo impresionante de saber, de verdad, de virtud y de generosidades infinitas…” (p. 55)
Oscar Beaujon: “En la cátedra y fuera de ella, en el Hospital y en la calle, el señorío del viejo Rísquez imponía la bondad de su sapiencia…” (p. 56)
Franz Conde Janh: “Por su elevado sentido de humanidad, por la nobleza de sus ideales activos y por el afán innato de servir, reunió las credenciales de Renovador…” (p. 57)
Fabián de Jesús Díaz: “Todo este conjunto de instituciones y este haz apretado de voluntades, hace un coro magnifico, hasta evocar la sinfonía de más fuerza y de más vasto alcanceen torno al nombre del maestro grato, de palabra fácil y la actitud comedida, de los ojos penetrantes y la barba puntiaguda, de la preocupación permanente y del dolor disimulado frente al atraso, a la desorganización y a la injusticia social…”(p. 58)
Juan Arráiz: “Yo no creo exagerar en mi deferencia de discípulo ayer, colega hoy y amigo siempre, al conceptuar al Doctor Rísquez como el tipo ejemplar del Médico moderno del hogar, todo luz, consagración y bondad…”(p. 58)
Diego Carbonell: “Tenía cinco años de edad y ya era maestro de escuela, y ese ha sido el mayor amor de su vida…”(p. 58)
Luis VillalbaVillalba: “Si en tres palabras pudiéramos volcar sintématicamente la obra cumplida en honor de Venezuela por ese hombre genial que fue el sabio Francisco Antonio Rísquez, elegiríamos éstas tres: Estudio, Trabajo, Pobreza…”(p. 58)
Carlos R. Travieso: “Son sus peculiares características: Apóstol de los desdichados y Cruzado de la Justicia”.(p. 58)
Joel Valencia Parpacén: “Rísquez tuvo unos ojos vivos, de mirada penetrante, un pensamiento ágil, una cabeza de sabio, una expresión que cautivaba y sobre todo un corazón bondadoso. Parecía un patriarca bíblico”.(p. 58)
Coinciden estos eminentes personajes que han marcado de alguna manera la Historia venezolana, en destacar rasgos esenciales en la personalidad del Doctor Rísquez, más en el aspecto íntimo del biografiado razón de este estudio, que en su labor científica, resaltar el aspecto personal riqueza invaluable para el desarrollo y actuación, en este caso, del desempeño del Doctor Rísquez en las Ciencias Médicas.
Fortalecer ésta apreciación sobre el Doctor Rísquez, su manera y forma de pensar y analizar su actuación de vida, obliga a citar directamente su pensamiento, a través de fragmentos de diversas intervenciones, recopiladas por Herrera (1977), reflejadas en sus diferentes facetas como:
Médico
Si de todas las actividades del espíritu humano, la de las ciencias es la que más le dignifica y mejor le sublima, de todas las ciencias, la Medicina es la que más ahonda en las entrañas de la sociedad; y de todas las Artes, la del Médico es la que más se impone al amor, al respeto y a la admiración de nuestros semejantes… (p. 59)
En el 8º Aniversario de la Academia Venezolana de Medicina.
Maestro
Toda predica puramente de palabra es absolutamente inútil, porque la voz se apaga en un medio social habituado a un modo de instrucción y de educación que mata la iniciativa, atrofia la voluntad y embota la energía… (p. 60)
Discurso de Orden en la Universidad Central, al iniciarse los Cursos del año 1910.
Venezolano
Yo asisto desde hace muchos años, en mis sueños de iluso, a la contemplación de un futuro cada vez más próximo y cada día más deseado para la prosperidad de Venezuela… (p. 60)
Geografía médica de la Isla de Margarita 1921.
Político
Las funciones de Gobierno, han de quedar reservados para una clase determinada de individuos, a quienes a su vez se les enseñe desde la escuela que la política no es el arte de ganar dinero, sino la ciencia de hacer la felicidad de los pueblos… (p. 61)
Universidad Central de Venezuela, 1910.
Historiador
Nunca aparece más grande y generoso un pueblo o una sociedad que cuando se detiene en la carrera de sus destinos, y volviendo la vista hacia el pasado, limpia el polvo de memorias casi olvidadas y las saca a lucir al sol de la Justicia, con todo el esplendor de sus preclaras ejecutorias. Nunca más generoso y grande, señores, que cuando movido por esos sentimientos no impuestos por las circunstancias del momento, sino nacidos espontáneamente del alma agradecida, levanta altares a la virtud o el mérito, y bate palmas de triunfo ante los grandes bienhechores, para quienes guarda la posteridad sus bendiciones y la gloria reserva su corona de inmortales… (p. 63)
Discurso de Orden pronunciado en el Centenario del nacimiento del Doctor José María Vargas, celebrado en la Guaira en el año de 1886.
Conclusión
La amplitud que se abre en la investigación histórica a través del género biográfico, se convierte en una fuente inagotable de información, no solo de la persona en estudio, sino de un sin número de circunstancias, pasajes, momentos para la comprensión, afirmación o modificación de los elementos históricos conocidos.
Cada aspecto estudiado del personaje, ayuda a clasificar esos momentos pasados, su desarrollo y consecuencias, pudiendo determinar, que la biografía es protagonista de los hechos históricos ya que sin los actores humanos no se producirían las gestas fidedignas.
En el caso de este breve estudio sobre la vida y actividad como Médico, Científico, Investigador, Maestro y Ciudadano común del Doctor Francisco Antonio Rísquez, se puede afirmar lo expresado con anterioridad, sus postulados, teorías y pensamientos sembrados en los valores y virtudes del ser,iniciaron cambios basados en la necesidad humana, modificando y enriqueciendo desde las bases, instituciones establecidas o creadas por su empeño en la búsqueda de un bien común, la sociedad y sus integrantes, el ser humano.
Hasta el presente día, he vivido pobre, como pobre nací y he de morir. Pero si sobre mi tumba no se desgajarán las flores reservadas a los ricos, espero que sobre ella no caerán maldiciones”.
F. A. Rísquez
Bibliografía
HERRERA, Carlos Rafael (1977). Francisco Antonio Rísquez, Patriarca de la Medicina Venezolana. Caracas. Editorial Texto.
LOBO, David (1893). Doctores. El Cojo Ilustrado, año II, Nº 44, p.379. Caracas.
RÍSQUEZ, Francisco Antonio (1898). Margarita.Porlamar.Tipografía del Sol.
RÍSQUEZ, Francisco Antonio (1926). París. Curso de Higiene Militar. París. Editorial Excelsior.
RÍSQUEZ, Francisco Antonio (1936). Biografía del Doctor Luis Razetti. Caracas.Tipografía Americana.
RÍSQUEZ, Francisco Antonio (1938). De mi Viaje al Sur. Caracas.Tipografía Americana.
RÍSQUEZ, Francisco Antonio (1939). Manual de la Enfermera.Santiago de Chile. Editorial Zig-Zag.
RÍSQUEZ, Francisco Antonio (1997). Francisco A. Rísquez. Discursos y Conferencias (Vida y Obra Literaria). Margarita. Gobernación del Estado Nueva Esparta.
RIVAS ALEXANDER, T. (1956). Francisco Antonio Rísquez, Medico y Maestro. La Asunción. SOD.
RODRÍGUEZ MORALES, Alberto (1956). Panegírico del Dr. Francisco Antonio Rísquez. Juan Griego. SOD.
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