Razón del nombre del blog

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El por qué del título de este blog . Según Gregorio Magno, San Benito se encontraba cada año con su hermana Escolástica. Al caer la noche, volvía a su monasterio. Esta vez, su hermana insistió en que se quedara con ella,y él se negó. Ella oró con lágrimas, y Dios la escuchó. Se desató un aguacero tan violento que nadie pudo salir afuera. A regañadientes, Benito se quedó. Asi la mujer fue más poderosa que el varón, ya que, "Dios es amor" (1Juan 4,16),y pudo más porque amó más” (Lucas 7,47).San Benito y Santa Escolástica cenando en el momento que se da el milagro que narra el Papa Gregorio Magno. Fresco en el Monasterio "Santo Speco" en Subiaco" (Italia)

lunes, 9 de noviembre de 2015

Ana Teresa Torres quiso reivindicar la ciudad desde la narrativa y la poesía. Para ello, realizó una selección de textos en los que la ciudad es leitmotiv desde distintas perspectivas. Esas líneas son las que llenan las más de 550 páginas deFervor de Caracas (Fundavag Ediciones).

Un libro muestra el eclecticismo literario de Caracas

La autora de la antología asegura estar en estos momentos en un reposo creativo | Foto Manuel Sardá / Archivo
La autora de la antología asegura estar en estos momentos en un reposo creativo | Foto Manuel Sardá / Archivo
“Hay que buscar en el tejido de las palabras la memoria, la herencia y el patrimonio cultural. Lo que supone la ciudad para nosotros, a pesar de la agresión y el atropello a lo largo del tiempo, especialmente en los años recientes”, acota Ana Teresa Torres

Ana Teresa Torres quiso reivindicar la ciudad desde la narrativa y la poesía. Para ello, realizó una selección de textos en los que la ciudad es leitmotiv desde distintas perspectivas. Esas líneas son las que llenan las más de 550 páginas de Fervor de Caracas (Fundavag Ediciones).
El libro reúne a autores de distintas épocas como Adriano Gonzalez León, Krina Ber, Vicente Gerbasi, Juan Antonio Pérez Bonalde, Edda Armas, Salvador Garmendia, Elisa Lerner, José Balza, Mariano Picón Salas, Rodrigo Blanco Calderón, Juan Vicente González, Leonardo Padrón, Antonia Palacios, Guillermo Sucre, William Niño Araque o Ricardo Ramírez Requena. Cada uno de ellos registra su contexto, entre añoranzas, pesares y virtudes con la mirada literaria, lejos de la rigurosidad histórica o sociológica.
“La selección está muy vinculada a mis lecturas. Además de la calidad literaria, quise que el autor sintiera fervor por la ciudad, como Jorge Luis Borges en Fervor de Buenos Aires”, explica sobre la antología.
Torres asegura que entre sus motivaciones fue reivindicar un lugar que se difumina por la mala fama propia de su caos y desorganización, en el que pareciera que las salvedades tienen cada vez menos cabida. “Hay que buscar en el tejido de las palabras la memoria, la herencia y el patrimonio cultural. Lo que supone la ciudad para nosotros, a pesar de la agresión y el atropello a lo largo del tiempo, especialmente en los años recientes”, acota Torres, quien afirma encontrarse en una especie de reposo literario: “No he logrado concretar nada en específico. Ya vendrá”.

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