ENTREVISTA PABLO ANTILLANO, PERIODISTA
"'Farruco' fue una equivocación"
"Toda búsqueda de sentidos en Venezuela conduce a una frase hecha: el socialismo, lo que es un disparate" "Hay que recordar que en todas partes del muno los procesos creativos y los artistas, están en la oposición"
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"El aporte privado en Venezuela ha existido pero ha sido poco porque el Estado siempre ha sido muy poderoso y generoso", dice ENIO PERDOMO
ÁNGEL RICARDO GÓMEZ , PABLO ANTILLANO , PERIODISTA | EL UNIVERSAL
lunes 8 de octubre de 2012 12:00 AM
Sea con "H" de Henrique Capriles o "H" de Hugo Chávez, el presidente de la República para el período 2013-2019 tiene ante sí un sector cultural que espera respuestas. Por ejemplo, el actor Javier Vidal escribía el 10 de septiembre en su perfil de Facebook: "En las promesas de los primeros 100 días de Capriles no escuché muy bien si dijo algo sobre la cultura. Si no lo tiene a bien, creo que es una necesidad incluir en esos 100 días la cultura y no empezar a pensar en ella en el día 101", y tras un decálogo de prioridades, señala: "La cultura, el arte, no es un problema de Estado. Es una solución de Estado".
Lo cierto es que en los programas y discursos de los hasta ayer candidatos, poco o nada hay sobre cultura. Antes de conocer los resultados electorales, Pablo Antillano, periodista con más de 30 años de oficio, apunta algunos de los que, a su juicio, son los retos del Ministerio de la Cultura a partir de enero de 2013.
Antillano habla, en principio, de lo que pasa con el sector en el ámbito global. "La cultura básicamente se refiere a la semiosis de la sociedad, a la búsqueda de sentidos, cómo esta va buscando sentidos a su actividad pública, a su actividad creativa... En el mundo, los textos nuevos, los pensadores, creen que hay un proceso de resemantización".
Para el periodista, una de las primeras acciones que habría que tomar en la cultura venezolana es liberar esos procesos de resemantización. "Ahorita están frenados porque el sentido ya está dado: 'Todo conduce a Chávez', toda búsqueda de sentidos en Venezuela conduce a una frase hecha: el socialismo, lo que es un disparate, primero, porque el socialismo es el mismo capitalismo pero más desarrollado y más justo".
-Capriles no ha ofrecido algo distinto en materia de cultura. ¿Será que lo dejará igual o no será su prioridad?
-A lo mejor él no ha dicho una cosa específica, pero todo el modelo que él está ofreciendo abre las puertas a las individualidades, quita de la escena pública la figura del líder aplastante. Él no es el objeto de su política, el objeto de su política es la acción hacia el otro lado. Eso nos hace pensar que va a haber una liberación de los procesos creativos. Hay que recordar, por cierto, que en todas partes del mundo los procesos creativos y los artistas, están en la oposición porque la resemantización, la búsqueda de sentidos, siempre apunta a lo nuevo, al futuro, y todo lo nuevo conlleva una contradicción con lo anterior y por eso hay siempre un choque con el poder. Los poetas oficiales, por ejemplo, no han logrado nada. El Gobierno no tiene música, ha estado pegado de Alí Primera.
-Ha dicho que el cine es uno de los pocos logros de la gestión chavista, en materia cultural. ¿Qué otros aplausos se merece?
-Yo creo que en el cine hay una conquista de los gremios porque aquí las películas las financia el CNAC (Centro Nacional de Cine) y este vive del dinero que produce la taquilla. Aquí se hizo una ley que implica a distribuidores, exhibidores, canales, laboratorios, y los obliga a pagar una parte de la taquilla y ha habido una expansión. Allí hay entonces unos comités -que no son como los comités del Gobierno en general- plurales, con representación de la ANAC, de los gremios.
-¿Entonces los aplausos en materia de cine son para los gremios en realidad?
-Sí. Una cosa similar debería haber para gestionar la televisión pública, un ente donde la sociedad esté expresada, que es el proyecto de Antonio Pasquali (Ratelve), que yo creo que eso viene. Eso no significa la privatización sino la transferencia a la sociedad.
-¿Puede hablarse de política cultural durante estos 14 años?
-Sí. Se ha caracterizado por el cierre a cualquier proceso de creación, de resemantización, de búsqueda de sentidos nuevos, porque como ellos ya tienen el sentido en el "librito rojo", para qué van a buscar sentidos. "Con el marxismo tengo", dijo uno por ahí en el canal 8. Ves, por ejemplo, a las editoriales y el porcentaje mayor es de divulgación de libros marxistas y un mínimo porcentaje de lo demás. No tienen escritores...
-Luis Britto García se enojaría con usted por esta afirmación.
-Bueno, él es la demostración de la excepción y Laura Antillano, mi hermana... Luis Alberto Crespo, "Crespito". Pero tienen un discurso terrible: que aquí hubo un cambio, que ahora sí hay libertad y antes no, cuando, en realidad, ellos fueron editados. Jorge Rodríguez se ganó el premio de El Nacional. El único que nunca ganó premios fue Francisco Sesto, entonces inventó la idea de los excluidos de la cultura. Pero él no puede decir que se excluía a la gente de izquierda, porque más bien siempre dominó la cultura, por ejemplo, Régulo Pérez, Jacobo Borges, Mateo Manaure... por mencionar la pintura nada más, y ganaron premios nacionales y los exponían los grandes museos.
-Ha mencionado a "Farruco" Sesto, un hombre polémico en la cultura en estos 14 años. ¿Qué reconoce y condena de su gestión?
-"Farruco" fue una equivocación absoluta, porque es él quien diseña esta perspectiva que cierra la creación de los sentidos nuevos. Él agarra dos o tres grandes frases clichés de Chávez y cierra las puertas del ministerio. Centraliza el poder de los museos, coloca gente solamente leal, no permite la disidencia. Por eso más nunca nadie se ocupó de él, los artistas se fueron a Los Chorros y a las galerías de Las Mercedes, se fueron a hacer teatro a las salitas, porque él impuso ese estilo, de insultar.
-Vamos al corazón de la entrevista: ¿cuáles considera que son los retos del próximo Presidente de la República en materia cultural?
-El primero es abrir de nuevo las ventanas a los creadores, que son los buscadores de sentido de la sociedad normalmente. Hay que promover la crítica en todos los ámbitos. Abrir las editoriales y los grandes concursos, en todas las áreas, con jurados plurales. Creo que se debe acabar con la idea nefasta de que "ya tenemos las respuestas a todas las preguntas", execrar la idea de que "las respuestas a todas las preguntas están en un hombre salvador y mesiánico". Es indispensable introducir a la sociedad privada en el complejo de financiamiento a la cultura, a través de una Ley de Mecenazgo real, como la que existe en los países desarrollados, donde se crean grandes fundaciones a las que van los artistas a desarrollar sus obras y son alentados y financiados sin necesidad de que alguien les pregunte con quién están. Descentralización del sistema de museos.
-Hablando de descentralización, muchos valoran los llamados gabinetes regionales de cultura. ¿Habría que mantenerlos?
-Esa era una de las grandes deudas, y sigue siendo: la descentralización de la actividad y las políticas públicas culturales, porque la provincia siempre estuvo muy abandonada. Eso hay que corregirlo pero con un sistema de descentralización general. Hay que devolverle a los estados y municipios su patrimonio, no solamente sus puentes y carreteras, sino sus museos, que ahora dependen del centro, a pesar de los gabinetes.
-¿Y la Misión Cultura?
-Es que esa es una cosa amorfa. ¿Qué es eso? ¿Tú sabes lo que es eso? Yo no sé lo que es, nadie lo sabe, pero sí tiene que haber un plan de descentralización para fortalecer talentos colectivos e individuales en todas las regiones.
-En líneas generales entonces habría que recuperar la pluralidad en la cultura...
-Y la libertad y que la cultura sea realmente de oposición. Esos artistas que hoy apoyan a Capriles cuando hablas con ellos te dicen: "El martes paso a la oposición", y así debe ser, tú lo apoyas para que gane, pero un artista, al otro día va para la oposición porque está en la crítica, en una perspectiva de debate, de creación de nuevos sentidos, de creación de cosas nuevas.
Lo cierto es que en los programas y discursos de los hasta ayer candidatos, poco o nada hay sobre cultura. Antes de conocer los resultados electorales, Pablo Antillano, periodista con más de 30 años de oficio, apunta algunos de los que, a su juicio, son los retos del Ministerio de la Cultura a partir de enero de 2013.
Antillano habla, en principio, de lo que pasa con el sector en el ámbito global. "La cultura básicamente se refiere a la semiosis de la sociedad, a la búsqueda de sentidos, cómo esta va buscando sentidos a su actividad pública, a su actividad creativa... En el mundo, los textos nuevos, los pensadores, creen que hay un proceso de resemantización".
Para el periodista, una de las primeras acciones que habría que tomar en la cultura venezolana es liberar esos procesos de resemantización. "Ahorita están frenados porque el sentido ya está dado: 'Todo conduce a Chávez', toda búsqueda de sentidos en Venezuela conduce a una frase hecha: el socialismo, lo que es un disparate, primero, porque el socialismo es el mismo capitalismo pero más desarrollado y más justo".
-Capriles no ha ofrecido algo distinto en materia de cultura. ¿Será que lo dejará igual o no será su prioridad?
-A lo mejor él no ha dicho una cosa específica, pero todo el modelo que él está ofreciendo abre las puertas a las individualidades, quita de la escena pública la figura del líder aplastante. Él no es el objeto de su política, el objeto de su política es la acción hacia el otro lado. Eso nos hace pensar que va a haber una liberación de los procesos creativos. Hay que recordar, por cierto, que en todas partes del mundo los procesos creativos y los artistas, están en la oposición porque la resemantización, la búsqueda de sentidos, siempre apunta a lo nuevo, al futuro, y todo lo nuevo conlleva una contradicción con lo anterior y por eso hay siempre un choque con el poder. Los poetas oficiales, por ejemplo, no han logrado nada. El Gobierno no tiene música, ha estado pegado de Alí Primera.
-Ha dicho que el cine es uno de los pocos logros de la gestión chavista, en materia cultural. ¿Qué otros aplausos se merece?
-Yo creo que en el cine hay una conquista de los gremios porque aquí las películas las financia el CNAC (Centro Nacional de Cine) y este vive del dinero que produce la taquilla. Aquí se hizo una ley que implica a distribuidores, exhibidores, canales, laboratorios, y los obliga a pagar una parte de la taquilla y ha habido una expansión. Allí hay entonces unos comités -que no son como los comités del Gobierno en general- plurales, con representación de la ANAC, de los gremios.
-¿Entonces los aplausos en materia de cine son para los gremios en realidad?
-Sí. Una cosa similar debería haber para gestionar la televisión pública, un ente donde la sociedad esté expresada, que es el proyecto de Antonio Pasquali (Ratelve), que yo creo que eso viene. Eso no significa la privatización sino la transferencia a la sociedad.
-¿Puede hablarse de política cultural durante estos 14 años?
-Sí. Se ha caracterizado por el cierre a cualquier proceso de creación, de resemantización, de búsqueda de sentidos nuevos, porque como ellos ya tienen el sentido en el "librito rojo", para qué van a buscar sentidos. "Con el marxismo tengo", dijo uno por ahí en el canal 8. Ves, por ejemplo, a las editoriales y el porcentaje mayor es de divulgación de libros marxistas y un mínimo porcentaje de lo demás. No tienen escritores...
-Luis Britto García se enojaría con usted por esta afirmación.
-Bueno, él es la demostración de la excepción y Laura Antillano, mi hermana... Luis Alberto Crespo, "Crespito". Pero tienen un discurso terrible: que aquí hubo un cambio, que ahora sí hay libertad y antes no, cuando, en realidad, ellos fueron editados. Jorge Rodríguez se ganó el premio de El Nacional. El único que nunca ganó premios fue Francisco Sesto, entonces inventó la idea de los excluidos de la cultura. Pero él no puede decir que se excluía a la gente de izquierda, porque más bien siempre dominó la cultura, por ejemplo, Régulo Pérez, Jacobo Borges, Mateo Manaure... por mencionar la pintura nada más, y ganaron premios nacionales y los exponían los grandes museos.
-Ha mencionado a "Farruco" Sesto, un hombre polémico en la cultura en estos 14 años. ¿Qué reconoce y condena de su gestión?
-"Farruco" fue una equivocación absoluta, porque es él quien diseña esta perspectiva que cierra la creación de los sentidos nuevos. Él agarra dos o tres grandes frases clichés de Chávez y cierra las puertas del ministerio. Centraliza el poder de los museos, coloca gente solamente leal, no permite la disidencia. Por eso más nunca nadie se ocupó de él, los artistas se fueron a Los Chorros y a las galerías de Las Mercedes, se fueron a hacer teatro a las salitas, porque él impuso ese estilo, de insultar.
-Vamos al corazón de la entrevista: ¿cuáles considera que son los retos del próximo Presidente de la República en materia cultural?
-El primero es abrir de nuevo las ventanas a los creadores, que son los buscadores de sentido de la sociedad normalmente. Hay que promover la crítica en todos los ámbitos. Abrir las editoriales y los grandes concursos, en todas las áreas, con jurados plurales. Creo que se debe acabar con la idea nefasta de que "ya tenemos las respuestas a todas las preguntas", execrar la idea de que "las respuestas a todas las preguntas están en un hombre salvador y mesiánico". Es indispensable introducir a la sociedad privada en el complejo de financiamiento a la cultura, a través de una Ley de Mecenazgo real, como la que existe en los países desarrollados, donde se crean grandes fundaciones a las que van los artistas a desarrollar sus obras y son alentados y financiados sin necesidad de que alguien les pregunte con quién están. Descentralización del sistema de museos.
-Hablando de descentralización, muchos valoran los llamados gabinetes regionales de cultura. ¿Habría que mantenerlos?
-Esa era una de las grandes deudas, y sigue siendo: la descentralización de la actividad y las políticas públicas culturales, porque la provincia siempre estuvo muy abandonada. Eso hay que corregirlo pero con un sistema de descentralización general. Hay que devolverle a los estados y municipios su patrimonio, no solamente sus puentes y carreteras, sino sus museos, que ahora dependen del centro, a pesar de los gabinetes.
-¿Y la Misión Cultura?
-Es que esa es una cosa amorfa. ¿Qué es eso? ¿Tú sabes lo que es eso? Yo no sé lo que es, nadie lo sabe, pero sí tiene que haber un plan de descentralización para fortalecer talentos colectivos e individuales en todas las regiones.
-En líneas generales entonces habría que recuperar la pluralidad en la cultura...
-Y la libertad y que la cultura sea realmente de oposición. Esos artistas que hoy apoyan a Capriles cuando hablas con ellos te dicen: "El martes paso a la oposición", y así debe ser, tú lo apoyas para que gane, pero un artista, al otro día va para la oposición porque está en la crítica, en una perspectiva de debate, de creación de nuevos sentidos, de creación de cosas nuevas.
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