Ang Lee quiso ofrecer una vivencia inmersiva dice fotógrafo de "Life of Pi"
Traducida como "Una aventura extraordinaria" o "La vida de Pi", la multinominada cinta relata la supervivencia de Pi, a la deriva en una barca salvavidas junto a un hambriento tigre de bengala llamado Richard Parker.
EL UNIVERSAL
miércoles 6 de febrero de 2013 10:02 AM
Los Ángeles.- El director Ang Lee quiso entregar una experiencia "inmersiva" en "Life of Pi", una fantasía en 3D sobre un joven indio que naufraga junto a un tigre, contó a la AFP el chileno-estadounidense Claudio Miranda, nominado al Óscar por la envolvente fotografía del filme.
Traducida como "Una aventura extraordinaria" o "La vida de Pi", la multinominada cinta relata la supervivencia de Pi, a la deriva en una barca salvavidas junto a un hambriento tigre de bengala llamado Richard Parker.
Trasladar a imágenes el filosófico libro del canadiense Yann Martel, en una película que transcurriría en su mayor parte en el agua, fue todo menos fácil para Miranda, quien traía experiencia visual digital tras dirigir la fotografía 3D de "Tron: Legacy", en 2010.
"Sabíamos que no podíamos poner a un muchacho y a un tigre juntos en un bote, sino que necesitaríamos que el departamento de Efectos Visuales agregara luego al tigre. Y a rezar para que no quedara como un personaje de dibujos animados", dijo Miranda, de 47 años, en una entrevista a la AFP.
Pero, además, los creadores debieron construir en Taiwán un tanque de 30 x 90 metros para poder controlar la luz en todas las escenas acuáticas; y estudiar el comportamiento de las olas y el océano en un filme donde el agua es prácticamente un tercer personaje, junto a Pi y Richard Parker.
En una ocasión, durante sus investigaciones, Ang y Miranda fueron a nadar a medianoche y se encontraron rodeados de plancton, dijo el fotógrafo, contando que los cineastas jugaron entonces con su fosforescencia para usarla como referencia en la escena en que salta una ballena.
Y luego vinieron las dificultades de trabajar en 3D en particular, porque los creadores temían que un bote a la deriva provocara náuseas a la audiencia.
"Queríamos que (la película) se sintiera inmersiva", dijo Miranda. Pero, al mismo tiempo, "al trabajar con agua en 3D, nos preocupaba mucho que la gente se mareara. (...) Muchas decisiones de edición y de a qué altura colocar el horizonte fueron tomadas pensando en que la gente sintiera menos náuseas".
"Ang Lee es muy experimental", agregó sobre el trabajo del cineasta taiwanés, ganador del Óscar por "Brokeback Mountain" (2005). "Quería hallar una nueva manera de narrar una historia y quiso explorar las tres dimensiones".
El esfuerzo rindió sus frutos: aún las (escasas) críticas desfavorables reservan elogios para el aspecto visual de "Life of Pi", que llegará a la gala de los Óscar el 24 de febrero con 11 nominaciones, entre ellas Mejor película, Mejor director, Mejor guión adaptado y Mejor fotografía.
Nacido en Chile pero trasladado a Estados Unidos cuando tenía un año, Miranda adjudicó parte del éxito de la fotografía del filme a su decisión de experimentar y romper algunas normas.
"Hay muchas reglas al trabajar en 3D", dijo. Por ejemplo, "algunos piensan que todo tiene que estar muy enfocado y no estoy de acuerdo".
En las escenas finales, "las cosas comienzan a caer fuera de foco, de forma natural. (...) Uno puede comenzar a navegar por la pantalla y entonces los ojos encontrarán algo suave, confortable", dijo el técnico, quien también fue nominado al Óscar a Mejor fotografía en 2009 por "The Curious Case of Benjamin Button".
Otra escena visualmente memorable tiene lugar en tierra firme, en la representación de una ceremonia en India totalmente iluminada por al menos 50.000 velas, que 2.000 personas de la producción se ocuparon de encender.
Pero el fotógrafo, si bien se dijo contento por las 11 nominaciones, lamentó que el actor indio Suraj Sharma fuera ignorado en la repartición de menciones.
"Todos fuimos nominados, todos los departamentos, es fantástico", dijo. "Pero me puso muy triste que Suraj no obtuviera nada (...). Ese muchacho tiene toda la película en sus hombros, actuando con alguien que no está allí el 80% del tiempo. Carga solo con todo el Océano".
Traducida como "Una aventura extraordinaria" o "La vida de Pi", la multinominada cinta relata la supervivencia de Pi, a la deriva en una barca salvavidas junto a un hambriento tigre de bengala llamado Richard Parker.
Trasladar a imágenes el filosófico libro del canadiense Yann Martel, en una película que transcurriría en su mayor parte en el agua, fue todo menos fácil para Miranda, quien traía experiencia visual digital tras dirigir la fotografía 3D de "Tron: Legacy", en 2010.
"Sabíamos que no podíamos poner a un muchacho y a un tigre juntos en un bote, sino que necesitaríamos que el departamento de Efectos Visuales agregara luego al tigre. Y a rezar para que no quedara como un personaje de dibujos animados", dijo Miranda, de 47 años, en una entrevista a la AFP.
Pero, además, los creadores debieron construir en Taiwán un tanque de 30 x 90 metros para poder controlar la luz en todas las escenas acuáticas; y estudiar el comportamiento de las olas y el océano en un filme donde el agua es prácticamente un tercer personaje, junto a Pi y Richard Parker.
En una ocasión, durante sus investigaciones, Ang y Miranda fueron a nadar a medianoche y se encontraron rodeados de plancton, dijo el fotógrafo, contando que los cineastas jugaron entonces con su fosforescencia para usarla como referencia en la escena en que salta una ballena.
Y luego vinieron las dificultades de trabajar en 3D en particular, porque los creadores temían que un bote a la deriva provocara náuseas a la audiencia.
"Queríamos que (la película) se sintiera inmersiva", dijo Miranda. Pero, al mismo tiempo, "al trabajar con agua en 3D, nos preocupaba mucho que la gente se mareara. (...) Muchas decisiones de edición y de a qué altura colocar el horizonte fueron tomadas pensando en que la gente sintiera menos náuseas".
"Ang Lee es muy experimental", agregó sobre el trabajo del cineasta taiwanés, ganador del Óscar por "Brokeback Mountain" (2005). "Quería hallar una nueva manera de narrar una historia y quiso explorar las tres dimensiones".
El esfuerzo rindió sus frutos: aún las (escasas) críticas desfavorables reservan elogios para el aspecto visual de "Life of Pi", que llegará a la gala de los Óscar el 24 de febrero con 11 nominaciones, entre ellas Mejor película, Mejor director, Mejor guión adaptado y Mejor fotografía.
Nacido en Chile pero trasladado a Estados Unidos cuando tenía un año, Miranda adjudicó parte del éxito de la fotografía del filme a su decisión de experimentar y romper algunas normas.
"Hay muchas reglas al trabajar en 3D", dijo. Por ejemplo, "algunos piensan que todo tiene que estar muy enfocado y no estoy de acuerdo".
En las escenas finales, "las cosas comienzan a caer fuera de foco, de forma natural. (...) Uno puede comenzar a navegar por la pantalla y entonces los ojos encontrarán algo suave, confortable", dijo el técnico, quien también fue nominado al Óscar a Mejor fotografía en 2009 por "The Curious Case of Benjamin Button".
Otra escena visualmente memorable tiene lugar en tierra firme, en la representación de una ceremonia en India totalmente iluminada por al menos 50.000 velas, que 2.000 personas de la producción se ocuparon de encender.
Pero el fotógrafo, si bien se dijo contento por las 11 nominaciones, lamentó que el actor indio Suraj Sharma fuera ignorado en la repartición de menciones.
"Todos fuimos nominados, todos los departamentos, es fantástico", dijo. "Pero me puso muy triste que Suraj no obtuviera nada (...). Ese muchacho tiene toda la película en sus hombros, actuando con alguien que no está allí el 80% del tiempo. Carga solo con todo el Océano".
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