Medidas para subsistir han tenido que tomar los Centros Comerciales

"Pasillos de escasez en los centros comerciales"

En apoyo a los comerciantes, la gerencia de la mayoría de los centros comerciales en la Gran Caracas eliminó la normativa que promovía la apertura de las tiendas los siete días de la semana en horario de 11:00 a.m. a 11:00 p.m.

Medidas para subsistir han tenido que tomar los Centros Comerciales (Venancio Alcázares)

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JORGE HERNÁNDEZ |  EL UNIVERSAL

domingo 13 de abril de 2014  08:39 AM

Reducción de horarios de trabajo, nómina mínima, dos días de cierre semanal y clausura definitiva de locales de marcas reconocidas son las medidas urgentes que tomaron propietarios y encargados de estos espacios en los centros comerciales de la Gran Caracas con la crisis económica, afirma Sofía Ramos, dueña de una tienda en los pasillos del Centro Comercial Líder de La California.

Cuenta Ramos que cada vez más el Líder es el reflejo de la crisis económica del país. "Aquí cada quien abre su tienda en el horario que le permite generar menos costos. Las leyes que aprueba el Gobierno solo promueven desempleo, escasez, falta de inversión y de divisas para aumentar las importaciones y el desarrollo de la industria nacional", analiza Ramos.

En apoyo a los comerciantes, la gerencia de la mayoría de los centros comerciales en la Gran Caracas eliminó la normativa que promovía la apertura de las tiendas los siete días de la semana en horario de 11:00 a.m. a 11:00 p.m. "Antes nos aplicaban multas, pero con la crisis ya no abrimos ni domingos ni lunes; el resto de la semana trabajamos desde el mediodía hasta las 7:00 p.m. Otros comerciantes no abren hasta por tres días, y al menos eso no genera una multa", relata Ramos.

En un gran número de tiendas de marcas reconocidas de ropa, juguetes, zapatos y equipos electrónicos que quedan en el CC Líder, los propietarios reconocen que desde finales de enero se redujeron las ventas, los números de visitas de compradores, los horarios de trabajo y la nómina en más de 50%.

"Nadie aprueba divisas y por lo tanto tenemos 20 tiendas cerradas. En otros locales solo trabaja un encargado o dueño con una vendedora, a quien no le pagan horas extras ni bonos por las pocas ventas", afirma Marisol Urbina, encargada de una tienda de ropa importada.

Víctor Maldonado, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Caracas, explica que los centros comerciales son la vitrina de la salud económica del país, por la diversidad de empresas y opciones que ofrecen a los compradores. "Hoy son el reflejo de una crisis económica. Por un lado, la inflación limita la demanda de clientes, y por el otro, la escasez limita la oferta de bienes y servicios".

Señala Maldonado que con la aprobación de un decreto gubernamental temporal, asociado al precio del metro cuadrado del alquiler de comercios, también se generó la crisis en los centros comerciales. "Tenemos casi un semestre de regulación de alquileres que provocó que los comercios se mantengan abiertos sin poder reponer sus costos", destaca el dirigente gremial.

Las medidas tomadas por el Ejecutivo impiden que los compradores que acuden a los centros comerciales puedan tener acceso libre a medicinas, comida, calzado y a cualquier repuesto que necesiten para cubrir sus necesidades, asegura Maldonado.

"Muchos comerciantes de los centros Sambil, Líder, Millenium y Los Naranjos, entre otros, trabajan a pesar de no generar recursos para cancelar los servicios", cuenta.

El director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Caracas relata además, que el marco jurídico vigente obligó a los dueños de locales en los centros comerciales a "reducir el tiempo de operatividad".

"En vez de producir más, crean leyes que desestimulan el trabajo y el crecimiento comercial. El Gobierno provoca efectos perversos con desempleo en una ciudad que necesita expandirse", añade Maldonado.

En los centros comerciales Sambil (Chacao), Millenium Mall (Los Dos Caminos), Galerías Plaza (Candelaria), Tolón (Las Mercedes) y Metrocenter (Capitolio), hay comerciantes que asoman que en al menos tres meses tendrán que cerrar sus tiendas, en perjuicio de trabajadores y compradores, quienes acuden a esos sitios porque aún los consideran seguros para hacer sus compras y divertirse junto a sus hijos.

Alberto Carrizalez, propietario de una farmacia en el Sambil, asegura que ahora hay poca oferta de leche, pañales, desodorantes, compotas y medicinas para niños y adultos. "Poca gente entra al ver los anaqueles vacíos. Pasillos de escasez hay en los centros comerciales de Caracas. Solo vendemos lo poco que hay en inventario y cerramos los pasillos que no tienen productos", alerta.

Precisa que en reuniones con voceros de la Cámara de Centros Comerciales ya estiman que de continuar la crisis económica en el país cerrarán alrededor de cinco mil locales en seis centros comerciales. "Eso se traduce en la pérdida de más de 10 mil empleos directos. La cifra se duplica en trabajadores indirectos, distribuidores, vendedores y choferes".

En el Centro Comercial Tolón los trabajadores consideran que el Ejecutivo solo busca llevarlos a la quiebra. "Somos gente de zonas populares que trabaja para mantener a sus hijos y eso el Gobierno no lo entiende", afirma Luisa Peña, afectada, quien reside en Catia.

Agrega que la pérdida de más puestos de trabajo realmente medirá el desastre económico en que está el país. "Muchos creen que tanto los surpermercados, centros comerciales y demás comercios están desabastecidos por bloqueos opositores. Pues no, es un desfalco nacional que ya sufrimos todos los venezolanos, quienes vamos en vías de racionamiento y mayor inseguridad".