Jueves, 24 Marzo 2016 20:06
Calima o calina es como se le denomina a la espesa cortina de humo que en la noche del 21 de marzo los caraqueños presenciaron en gran parte de la ciudad.
Después de un cielo despejado y un sol radiante que estuvo acompañado por brisa, una pantalla de partículas de polvo suspendidas en el aire se posó sobre el cielo caraqueño.
Se trata de un fenómeno meteorológico propio de este periodo de sequía, explicó Manuel González, pronosticador de guardia del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inameh).
En la calle y en la red social Twitter muchos de los comentarios especulaban sobre el origen del “extraño humo”. Algunos manifestaban que era producto de un incendio en la montaña, pues olía a vegetación quemada, mientras que otros lo asociaban con la basura.
“Como ayer no hubo corrientes de aire fuertes, las partículas de polvo y contaminación se quedaron suspendidas en el aire. Esto puede estar entre 60 y 100 metros de altura, depende de la densidad de la partícula”, dijo.
Vale mencionar que los constantes incendios ocurridos durante este año en la montaña Waraira Repano contribuyeron a la formación de la calima. A esto se le suma la contaminación expedida del parque automotor de Caracas y Miranda.
González agregó que este tipo de fenómenos ocurren en áreas industriales y ciudades.
Explicó que las personas que son sensibles al polvo pueden desarrollar alergias, y las que sufren de asma podrían empeorar la situación, por lo que recomendó a la ciudadanía mantenerse hidratada principalmente con agua para evitar alguna descompensación debido a intensos calores.
En Guarenas, Guatire y los Altos Mirandinos también se reportó calima en el ambiente.
“Igual ocurrió en Maracay, dados los incendios que han ocurrido en el Parque Henri Pittier”, mencionó el pronosticador.
En este sentido, alertó a los ciudadanos a que estén pendiente de las enfermedades respiratorias, ya que las personas asmáticas pueden resultar afectadas, por lo que recomendó el uso de tapabocas.
González adelantó que a finales de abril y en noviembre comienzan los periodos lluviosos, pero es en agosto cuando pueden sentirse las primeras precipitaciones.
“Por estar ubicados en el trópico no podemos decir que es verano o invierno. Sino periodo seco y lluvioso”, aclaró.
Este fenómeno puede ocurrir en cualquier momento que las condiciones climáticas lo permitan (presencia de vientos débiles, incendios forestales y contaminación), y en 2010 los caraqueños presenciaron la misma situación ocurrida la noche del 21 de marzo.
La diferencia fue que la bruma duró más días en la capital y un intenso calor hizo insoportable la permanencia en las calles.
En ese entonces, durante el día no se pudo divisar la montaña Waraira Repano pues, con la luz del sol y el polvo, se creó un efecto luminoso como si se estuviera viendo a través de una bolsa plástica o un papel vegetal.
(Ciudad Ccs)
No hay comentarios:
Publicar un comentario