Hipnosis...

"Todo marchaba muy bien hasta el momento que el ilusionista les dio la orden de despertar y... nada"

MARÍA ISABEL PÁRRAGA B. |  EL UNIVERSAL

lunes 5 de septiembre de 2011  12:00 AM

Parece una información extrañísima pero tal vez sea la clave para entender parte del "letargo" que tenemos los venezolanos cuando, a pesar de todo lo que nos sucede, como por ejemplo la cifra récord en asesinatos durante el mes de agosto o esa anómala circunstancia de observar cómo cada vez que vamos al mercado pagamos más... y más... y más... , o cómo la luz (sobre todo en el interior del país) es un acto de fe, o cómo aunque existe una imperiosa necesidad de consenso, de encuentro, de reconciliación nacional se sigue sembrando el odio desde las más altas instancias del poder como materia prima del ambiente preelectoral, o cómo "una enfermedad" es el centro de atención cuando todo a su alrededor está en terapia intensiva. Sí, una noticia que nos llegó de Colombia vía agencias informativas quizás sea "la pieza" que nos faltaba para comprender este estado casi hipnótico en el que todas estas circunstancias antes descritas (y otras más) nos tienen "adormilados". 

Sucedió en la localidad colombiana de Mocoa, allí el mago de un circo que realizaba una función decidió hacer una práctica colectiva de hipnosis a unos 70 estudiantes del centro educativo del pueblo. Todo marchaba muy bien hasta el momento que el ilusionista les dio la orden de despertar y... nada. Los menores no respondieron. Relata la nota informativa que los chicos tuvieron que ser llevados a un hospital de esa ciudad, capital del selvático departamento de Putumayo (sur) para que pudieran salir del letargo profundo que les fuera inducido a través de la hipnosis. 

Entonces, si ya ha pasado según el relato antes mencionado ¿por qué no pensar que poco más o menos nos está sucediendo algo así aquí y ahora? Sí, seguro muchos dirán: "eso sucedió en un circo y con una audiencia cerrada". Pero también es verdad que para eso están los medios y las cadenas. ¿Será que parte de los objetivos de tantas y tantas y tantas horas de transmisión de cuanto acto oficial, oficioso o simplemente de muestra gratuita de la cotidianidad de gestión como un consejo de ministros o la "toma de una pastilla" ahora con los quebrantos de salud tienen como objetivo provocar un estado hipnótico a gran escala? ¿Sucederá que estamos todos en una suerte de "conciencia en pausa" y que por eso ya nada nos sorprende? ¿Será que hay un gran mago detrás de todo esto? ¿Estamos viviendo la realidad o que, como decía Calderón de la Barca: "la vida es sueño"? 

La verdad es que después de leer esa extrañísima información de lo que sucedió en la ciudad de Mocoa, en Colombia, ahora albergamos muchas más dudas. Si en diciembre de 2012 no hay cambios habrá que pensar en la posibilidad real del éxito de un plan hipnótico a gran escala. ¿Despertaremos? 

mariaisabelparraga@gmail.com