Edgar Darío Núñez A. || Oído al Derecho
¿Corrupción en el Poder Judicial?
nunezalcantara@yahoo.es; @nunezalcantara
El diputado Carlos Escarrá ha señalado públicamente: "El Poder Judicial es uno de los elementos más corruptos y donde menos hemos hecho lamentablemente en la revolución". Esta aseveración debe ser seriamente analizada por quienes tenemos participación en el sistema de justicia venezolano. De entrada, debemos señalar: sí han hecho y mucho, pero lo realizado ha sido erróneo. Veamos.
Comencemos por definir que corrupción es algo que está echado a perder, depravado, podrido o dañado, según define el DRAE. Si esto es así, preguntémonos ¿qué ha podrido o dañado al Poder Judicial? ¿Desde cuándo está en ese estado? Digamos algunas cosas: en el año 1998 cuando le planteamos a Venezuela un modo distinto de gobernar, en comparación con los partidos tradicionales, lo hicimos creyendo en la reducción posible de la corrupción administrativa (no se veía la privada como ahora) que dañaba al poder político; alegábamos que el Poder Judicial debería ser el centro gravitacional del ejercicio del poder público, haciendo el papel de gran equilibrador entre las otras dos ramas (Legislativo y Ejecutivo).
Pero, luego de más de 12 años del gobierno actual, en el cual el profesor Escarrá es un importante miembro, lo dañado se refleja en la escogencia de jueces siempre por color político; en la selección sin consideración de la calidad académica del juzgador escogido; en que el juez ve al abogado litigante como un enemigo; y casi es un delito ser conocedor del Derecho. Recuérdese que no existe un ser más corruptible que aquel que conoce sus grandes limitaciones para la labor que se le encarga y debe sobrevivir.
Recordemos que en los tiempos idos los abogados, de cualquier color político, íbamos al tribunal a sostener una conversación con los jueces y "vivíamos" en un ambiente de conocimiento e interacción jurídica. Pregunte ahora a qué van los profesionales del Derecho a la sede tribunalicia. Para usted es tiempo de hacer, no de criticar. ¡Averigüe diputado, que usted es gran corresponsable de ello!
Plecas literarias. Por bondad del profesor Eduardo Pachano, director de la Escuela de Derecho de la FCJP de la ULA, hemos revisado el texto Crisis y abastecimiento agrícola, del profesor Oscar David Soto. Un excelente análisis de los indicadores económicos agrarios del país entre los años 1997 y 2010. Abogados, economistas y políticos debemos consultar esta obra científica. ¡Recomendable!
El profesor Ricardo Henríquez La Roche acaba de publicar la tercera edición de su obra Régimen jurídico de los accidentes de tránsito. Es una valiosa actualización del contenido cuya anterior versión es del año 1997; vuelve tras un aggiornamento legislativo que le hace material imprescindible para el trabajo profesional y estudiantil sobre el Derecho del tránsito. ¡Bienvenida esa magnífica obra!
También la profesora Hildegard Rondón de Sansó ha publicado un interesante trabajo denominado El Procedimiento administrativo y sus actuales tendencias legislativas, en el cual desarrolla su visión sobre el Derecho Administrativo venezolano y sus concepciones en este siglo. Por demás interesante.
Pleca judicial. La Dra. Lucilda Fátima Ollarves Velásquez ha dejado el cargo de juez del Tribunal Primero de Primera Instancia en lo Civil y Mercantil de Carabobo; tras de sí deja un estela de buenos comentarios y halagos profesionales. Corresponde a la ex decana Hildegarda Betancourt asumir el reto de un órgano de justicia que por su complejidad e importancia impone una dedicación al estudio y trabajo fuera de límites. ¡Les deseamos suerte a ambas!
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