Razón del nombre del blog

Razón del nombre del blog
El por qué del título de este blog . Según Gregorio Magno, San Benito se encontraba cada año con su hermana Escolástica. Al caer la noche, volvía a su monasterio. Esta vez, su hermana insistió en que se quedara con ella,y él se negó. Ella oró con lágrimas, y Dios la escuchó. Se desató un aguacero tan violento que nadie pudo salir afuera. A regañadientes, Benito se quedó. Asi la mujer fue más poderosa que el varón, ya que, "Dios es amor" (1Juan 4,16),y pudo más porque amó más” (Lucas 7,47).San Benito y Santa Escolástica cenando en el momento que se da el milagro que narra el Papa Gregorio Magno. Fresco en el Monasterio "Santo Speco" en Subiaco" (Italia)

martes, 10 de abril de 2012

Ojalá entendiéramos que "la Verdad nos hace libres"

"No soy de ningún sitio. Sino que soy"
VÍCTOR SÁNCHEZ FERRER | EL UNIVERSAL
martes 10 de abril de 2012 04:26 PM
La conversación

Hace unos días estuve visitando a mi hermano Gualberto en Carolina del Norte. Desde que hablé con él un par de semanas antes de volar a Raleigh, mi hermano me dijo que le gustaría que conociera a un amigo de origen chino que había conocido recientemente en el trabajo. "Se llama Yilin", me dijo, "y tiene muchas historias interesantes que contar. Nunca me aburro cuando hablo con él".

Apenas conocí a Yilin, auguré una excelente conversación durante la cena. Me saludó con una sonrisa y un buen estrechón de manos. En ningún momento dejó de sonreír, y se dedicó a escuchar atentamente lo que le contábamos y a hacer preguntas que asomaban su cultura e inteligencia.

Dado que estuvimos conversando por más de 4 horas, tuvimos oportunidad de recorrer temas muy variados. De hecho espero poder escribir más allá de este artículo para intentar cubrir la conversación en toda su extensión. El tema que más me apasionó y el cual quiero desarrollar en los siguiente párrafos es: "No se es de ningún sitio. Se es".

Yilin no es de ningún sitio

Además de ser originario de China, durante los veinte años que tiene en el país Yilin ha vivido en más de cinco ciudades de Estados Unidos: Los Ángeles, San Diego, Chicago, Boston y Raleigh. Yilin define este itinerario de mudanzas como un haber logrado una relativa familiaridad, pero a la vez nunca haberse sentido "en casa". Y de nuevo, allí estaba Yilin, a dieciocho meses de haber llegado a Raleigh disfrutando de una cena de Thanksgiving con dos hermanos venezolanos y mi cuñada que es de origen paraguayo. Con total naturalidad se manejó durante todo el rato como si no hubiese diferencia alguna en nuestras culturas.

Yilin explicaba desde la profundidad de su experiencia cómo se había acostumbrado a no dar muchas explicaciones sobre donde nació o donde ha vivido. Él prefiere que la gente se tome el tiempo para darse cuenta que, aunque todos los sitios donde ha vivido lo han formado, su personalidad va mucho más allá de los estereotipos de una región. "Por que", comentó, "más que las experiencias en sí mismas, son los ojos y la actitud con la que cada quien ha vivido las ha vivido, los que realmente nos definen".

Así continuaba, "si digo que soy de China, la gente me pregunta: ¿y entonces cómo es que sabes tan buen inglés? Si digo que soy de San Diego, me preguntan de qué país soy originario. Si digo que soy de Boston, me dicen que tengo acento de la Costa Oeste. Si les digo que soy de Raleigh, me preguntan que dónde estudié y se dan cuenta que no soy de aquí porque estudié en China".

No es este juego de preguntas y respuestas lo que incomoda a Yilin, porque simplemente son distintas rutas para llegar a una realidad. Y la realidad es que Yilin no es de ningún sitio y es de todos a la vez. Nadie puede definir a Yilin por los lugares donde ha estado sin que ello represente encorsetarlo en un estereotipo.

Lo que sí le incomoda a Yilin son las etiquetas. Así proseguía diciendo: "me parece incorrecto que la gente se defina por el lugar de donde es, porque ello implica que ha recibido su personalidad y cultura de una forma pasiva, por el solo hecho de haber crecido en determinado medio". Y la realidad es que cada uno de nosotros interactúa con la cultura y la sociedad, pero ninguna de éstas dominan en sus interioridad más personal. En el trato cotidiano, parece que tuviésemos tanta prisa por "etiquetar" al otro, que no nos damos tiempo de entender su carácter único, de persona irrepetible. Yilin concluyó diciendo: "Personalmente, prefiero conducirme proactivamente respecto a mi propia formación y tomar lo que considero como verdadero y bueno de todos los sitios, buscando la verdad con sinceridad y valentía".

No hay comentarios: