Lectura Tangente
Notitarde 22-09-12
Corrompo, luego existo
Antonio Sánchez García
"En cuanto salió la aurora, dieron prisa los ángeles a Lot, diciéndole: 'Levántate, coge a tu mujer y a las dos hijas que tienes, no sea que perezcas tú también por las iniquidades de la ciudad' Génesis, 19, 15.
1
Siempre he valorado en grado máximo la contribución de José Vicente Rangel al encumbramiento, fortalecimiento y entronización de Hugo Chávez Frías al frente del Estado venezolano. Sin temor a exagerar, creo que permitió lo que luego los Castro terminaron de afianzar con su know how represivo, su ingeniería social y su aparato de información: quebrar la oposición venezolana, montar un auténtico ministerio de asuntos electorales para terminar de asaltar las instituciones por vía constitucional y desarrollar la estrategia que terminaría por demostrarse esencial en el logro del dominio de las dos instituciones ejes de su sistema de dominio: corromper a las fuerzas armadas y al sistema judicial.
Ciertamente: los fundamentos del sistema de control político policial del chavismo fueron sentados por Luis Miquilena y José Vicente Rangel, los dos operadores políticos a quienes se debe el asalto al Poder del teniente coronel golpista. Pero a juzgar por sus propias confesiones - que me guardo de tomar estrictamente a la letra - los senderos de ambos operadores se bifurcan durante los dos primeros años de gobierno y Luis Miquilena se aparta de las responsabilidades de poder para terminar por romper sus vínculos con Hugo Chávez. ¿Súbitos pruritos democráticos? Es entonces que Rangel asume el dominio en solitario de los mecanismos de control político y tanto desde la vicepresidencia, que ocupa durante los cinco años cruciales que van de los luctuosos sucesos de abril hasta más allá de la reelección presidencial del 2006, como de la cancillería y el ministerio de defensa culmina el trabajo de construcción de un sistema de poder que pudo resistir el equivalente a tres períodos de gobierno. Ha sido, en efecto, el auténtico poder detrás del trono.
Sería interesante desvelar la urdimbre de contactos, intrigas, mecanismos de espionaje y sobre todo del profundo y detallado conocimiento de las fortalezas y debilidades de los actores políticos, económicos, financieros, mediáticos y culturales venezolanos para llegar a comprender la relevancia del papel jugado por Rangel en el montaje de la tiranía. Intrigante de alta escuela, inescrupuloso como una hiena y alcahueta de toda suerte de contubernios, sin Rangel, el hombre de la izquierda, no se explica el dominio que el chavismo ha podido ejercer sobre los factores de la oposición venezolana. Fue, a nuestro entender, el factor clave tanto en el desmontaje del 11 de abril como del estruendoso fracaso opositor cuando el Referéndum Revocatorio y la postulación de Manuel Rosales. En sus manos estuvo llevar al fracaso los 3 intentos opositores. ¿Quiere conocer al ingeniero de nuestros fracasos, comenzando por el defenestramiento de Carlos Andrés Pérez, el entendimiento Chávez-Caldera, la ominosa caída de Alfaro Ucero y el evitable triunfo de Hugo Rafael Chávez Frías? Cherchez Rangel!
2
No son asuntos menudos. Tienen que ver con la más grave crisis sociopolítica vivida por la República. Y lo encuentran siempre, oculto, en el centro de los acontecimientos, suerte de Antonio Leocadio Guzmán de un período tan confuso, tenebroso y malévolo como el que supiera manejar con singular maestría el progenitor de Antonio Guzmán Blanco.
Será tarea de la historiografía venezolana desentrañar la pesadilla y el espanto. Y esperar del inmenso talento de un Ramón Díaz Sánchez la descripción de la elipse de esta insólita ambición de poder que aunara brutalidad y perspicacia, violencia y encantamiento, ideología y corrupción. ¿Por que las fuerzas armadas chilenas se negaron a plegarse a los encantos de Fidel Castro, que agotó sus esfuerzos intentado comprar a sus generales como logró comprar al mismo ejército que tres décadas atrás le propinara una contundente derrota en las montañas de Venezuela? ¿Por qué el sistema judicial chileno rechazó desde un principio plegarse a los requerimientos de un proceso de arrollamiento tanto o más convincente y fanatizado que el chavista? ¿Por qué tras los mismos mil días de socialismo la oposición chilena y las fuerzas armadas ponen un dramático final al proyecto del allendismo mientras en Venezuela se escenifica una zarzuela que de la mano del Estado Mayor y el G2 cubano logra fortalecer y entronizar la tiranía chavista?
Son problemas que requieren de una acuciosa investigación y de respuestas profundas, convincentes, esclarecedoras. La Venezuela que hoy intenta deslastrarse de la pesadilla y la canalla no es otra que la que se ha hundido en el fango y la degradación. Si bien el despertar de los sectores populares bajo el límpido liderazgo de una clase media que no ha torcido su brazo durante estos 14 años de tiranía augura el más promisorio de los futuros, deberemos iniciar la andadura por un nuevo ciclo histórico bajo la existencia de las mismas instituciones que se dejaron corromper hasta desfigurar por completo nuestro perfil de Nación libre, democrática y soberana. La justicia es un remedo al servicio de un tiranuelo. Las fuerzas armadas una corporación rendida al poder del dinero y la concupiscencia. El sistema legislativo tan obsecuente y vergonzante como el que en su momento criticara acerbamente Rómulo Gallegos y servía a Cipriano Castro, el directo antecedente de nuestro charlatán de feria.
Hablamos de vicios seculares. Hablamos de taras que ensombrecen la historia de Venezuela hasta la vergüenza. Hablamos de lacras tan hondamente afincadas en nuestra personalidad como Nación, que duele aceptarlas y preocupa su pertinacia y su enraizamiento. Y el inmenso esfuerzo de orden educativo y cultural que será preciso para intentar una limpieza verdadera.
Puede que de todas las taras contra las que deberemos luchar sin denuedo, la de la inmoralidad en el manejo de los asuntos públicos sea la más grave, la más onerosa. Pocos países resisten una avalancha de inmundicia, corruptelas y estupros tan descomunales como los que hoy nos agobian: funcionarios del estado, miembros de las fuerzas armadas, politicastros que se venden a plena luz del día con una impudicia y un descaro verdaderamente abismales. Me atrevo a afirmar que no hay otro país en América Latina cuyo sistema político dominante esté tan corrompido como el venezolano. Que ha hecho, además, de la venalidad y la corrupción un arma poderosa de injerencia y dominio político. Cabe afirmar que ninguna organización de la izquierda socialista que respalda al actual presidente de la república se ha librado de ser corrompido: políticos, periodistas, publicistas, académicos no han sido capaces de resistir la compra de conciencia favorecida por la renta petrolera. Venezuela ha sido el demonio corruptor del nuevo milenio.
3
De entre los máximos responsables por esta obra verdaderamente apocalíptica, imposible obviar a la comadrona del estupro, al capo de la estirpe, al padrino de esta saga, al cabeza viva de los Corleone venezolanos, JV Rangel. Vale la pena consignar el juicio que le fuera abierto a José Vicente Rangel Cárdenas, su padre, con ocasión de los Juicios de Responsabilidad Civil y Administrativa incoados en 1945: "Cursa en los autos el libelo de demanda incoada por el ciudadano Cruz Ramírez Contreras, procurador General del Estado, con fecha 12 de junio de 1936, por ante el ciudadano Juez de primera Instancia en lo Civil y Mercantil del Estado. En dicho documento se revela el cuerpo entero, la personalidad del indiciado y su moral administrativa al frente de aquella entidad federal. Dice así: '…durante su administración, con respecto al manejo del Erario Público del Estado, aparece un déficit por lo correspondiente al Ramo de Papel Sellado del Estado, e igualmente, se anota la falta de un camión de volquete adquirido para las Obras Públicas y de cuatro carretas con sus correspondientes bestias; además el mencionado Mandatario dispuso de varios materiales de la casa de Gobierno en ruinas, de esta ciudad, para dedicarlos a la fabricación de una casa de su propiedad particular en esa misma población. Tales materiales son, ocho ventanas con sus correspondientes volados de hierro; una cantidad considerable de tejas, lumbres y otras maderas también del mismo edificio, lo cual entro a especificar en la forma siguiente, con sus valores determinados: Primero.- Diferencia por entrada de Papel Sellado en el año de mil novecientos treinta y cinco, según lo demuestra el documento que presento en un folio útil, etc., etc., etc.". De todo lo cual la sentencia termina por determinar los montos irregularmente apropiados y la pena a ser establecida.
No alcanzaron sus bienes a cubrir los costos de los bienes saqueados. Ni tienen las dimensiones apocalípticas de los que su hijo y su nieto han alcanzado a acumular pisoteando todo sentido de la moral pública. Ni muchísimo menos los miles y miles de millones de dólares que bajo la satrapía del personaje que Rangel encumbró al poder han sido arrebatados del tesoro público para satisfacer la avaricia de la banda de facinerosos que le cayera a saco a la mayor fortuna jamás habida en toda la historia de la República. Solo en regalos - forma directa de saqueo para satisfacer la gula de castristas, montoneros, tupamaros, farianos, elenos, cocaleros, sandinistas, lulistas, kirchneristas y comunistas latinoamericanos de todo pelaje - se calcula la estrambótica cifra de 160 mil millones de dólares. Las fortunas arrebatadas al erario público que hoy llenan las bóvedas de bancos europeos y asiáticos, incluso norteamericanos, a nombre de generales, almirantes, comandantes, capitanes y funcionarios chavistas como Aristóbulo Istúriz y Diosdado Cabello - que de muertos de hambre se convirtieran en nombre del pueblo, en multimillonarios - se elevaría a la cifra de sesenta mil millones de dólares.
Quienes nos criamos en la mayor pobreza y supimos honrar la decencia eclesial de la izquierda latinoamericana en cuyo ejemplo nos educáramos para el servicio público, debemos rendirnos a la evidencia del estupro y la inmoralidad en que ha caído prostituida por el insólito poder desintegrador de la corruptocracia chavista. Un triste, un lamentable aporte a la historia de su infamia.
E-mail: sanchezgarciacaracas@gmail.com
Twitter: @sangarccs
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Siempre he valorado en grado máximo la contribución de José Vicente Rangel al encumbramiento, fortalecimiento y entronización de Hugo Chávez Frías al frente del Estado venezolano. Sin temor a exagerar, creo que permitió lo que luego los Castro terminaron de afianzar con su know how represivo, su ingeniería social y su aparato de información: quebrar la oposición venezolana, montar un auténtico ministerio de asuntos electorales para terminar de asaltar las instituciones por vía constitucional y desarrollar la estrategia que terminaría por demostrarse esencial en el logro del dominio de las dos instituciones ejes de su sistema de dominio: corromper a las fuerzas armadas y al sistema judicial.
Ciertamente: los fundamentos del sistema de control político policial del chavismo fueron sentados por Luis Miquilena y José Vicente Rangel, los dos operadores políticos a quienes se debe el asalto al Poder del teniente coronel golpista. Pero a juzgar por sus propias confesiones - que me guardo de tomar estrictamente a la letra - los senderos de ambos operadores se bifurcan durante los dos primeros años de gobierno y Luis Miquilena se aparta de las responsabilidades de poder para terminar por romper sus vínculos con Hugo Chávez. ¿Súbitos pruritos democráticos? Es entonces que Rangel asume el dominio en solitario de los mecanismos de control político y tanto desde la vicepresidencia, que ocupa durante los cinco años cruciales que van de los luctuosos sucesos de abril hasta más allá de la reelección presidencial del 2006, como de la cancillería y el ministerio de defensa culmina el trabajo de construcción de un sistema de poder que pudo resistir el equivalente a tres períodos de gobierno. Ha sido, en efecto, el auténtico poder detrás del trono.
Sería interesante desvelar la urdimbre de contactos, intrigas, mecanismos de espionaje y sobre todo del profundo y detallado conocimiento de las fortalezas y debilidades de los actores políticos, económicos, financieros, mediáticos y culturales venezolanos para llegar a comprender la relevancia del papel jugado por Rangel en el montaje de la tiranía. Intrigante de alta escuela, inescrupuloso como una hiena y alcahueta de toda suerte de contubernios, sin Rangel, el hombre de la izquierda, no se explica el dominio que el chavismo ha podido ejercer sobre los factores de la oposición venezolana. Fue, a nuestro entender, el factor clave tanto en el desmontaje del 11 de abril como del estruendoso fracaso opositor cuando el Referéndum Revocatorio y la postulación de Manuel Rosales. En sus manos estuvo llevar al fracaso los 3 intentos opositores. ¿Quiere conocer al ingeniero de nuestros fracasos, comenzando por el defenestramiento de Carlos Andrés Pérez, el entendimiento Chávez-Caldera, la ominosa caída de Alfaro Ucero y el evitable triunfo de Hugo Rafael Chávez Frías? Cherchez Rangel!
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No son asuntos menudos. Tienen que ver con la más grave crisis sociopolítica vivida por la República. Y lo encuentran siempre, oculto, en el centro de los acontecimientos, suerte de Antonio Leocadio Guzmán de un período tan confuso, tenebroso y malévolo como el que supiera manejar con singular maestría el progenitor de Antonio Guzmán Blanco.
Será tarea de la historiografía venezolana desentrañar la pesadilla y el espanto. Y esperar del inmenso talento de un Ramón Díaz Sánchez la descripción de la elipse de esta insólita ambición de poder que aunara brutalidad y perspicacia, violencia y encantamiento, ideología y corrupción. ¿Por que las fuerzas armadas chilenas se negaron a plegarse a los encantos de Fidel Castro, que agotó sus esfuerzos intentado comprar a sus generales como logró comprar al mismo ejército que tres décadas atrás le propinara una contundente derrota en las montañas de Venezuela? ¿Por qué el sistema judicial chileno rechazó desde un principio plegarse a los requerimientos de un proceso de arrollamiento tanto o más convincente y fanatizado que el chavista? ¿Por qué tras los mismos mil días de socialismo la oposición chilena y las fuerzas armadas ponen un dramático final al proyecto del allendismo mientras en Venezuela se escenifica una zarzuela que de la mano del Estado Mayor y el G2 cubano logra fortalecer y entronizar la tiranía chavista?
Son problemas que requieren de una acuciosa investigación y de respuestas profundas, convincentes, esclarecedoras. La Venezuela que hoy intenta deslastrarse de la pesadilla y la canalla no es otra que la que se ha hundido en el fango y la degradación. Si bien el despertar de los sectores populares bajo el límpido liderazgo de una clase media que no ha torcido su brazo durante estos 14 años de tiranía augura el más promisorio de los futuros, deberemos iniciar la andadura por un nuevo ciclo histórico bajo la existencia de las mismas instituciones que se dejaron corromper hasta desfigurar por completo nuestro perfil de Nación libre, democrática y soberana. La justicia es un remedo al servicio de un tiranuelo. Las fuerzas armadas una corporación rendida al poder del dinero y la concupiscencia. El sistema legislativo tan obsecuente y vergonzante como el que en su momento criticara acerbamente Rómulo Gallegos y servía a Cipriano Castro, el directo antecedente de nuestro charlatán de feria.
Hablamos de vicios seculares. Hablamos de taras que ensombrecen la historia de Venezuela hasta la vergüenza. Hablamos de lacras tan hondamente afincadas en nuestra personalidad como Nación, que duele aceptarlas y preocupa su pertinacia y su enraizamiento. Y el inmenso esfuerzo de orden educativo y cultural que será preciso para intentar una limpieza verdadera.
Puede que de todas las taras contra las que deberemos luchar sin denuedo, la de la inmoralidad en el manejo de los asuntos públicos sea la más grave, la más onerosa. Pocos países resisten una avalancha de inmundicia, corruptelas y estupros tan descomunales como los que hoy nos agobian: funcionarios del estado, miembros de las fuerzas armadas, politicastros que se venden a plena luz del día con una impudicia y un descaro verdaderamente abismales. Me atrevo a afirmar que no hay otro país en América Latina cuyo sistema político dominante esté tan corrompido como el venezolano. Que ha hecho, además, de la venalidad y la corrupción un arma poderosa de injerencia y dominio político. Cabe afirmar que ninguna organización de la izquierda socialista que respalda al actual presidente de la república se ha librado de ser corrompido: políticos, periodistas, publicistas, académicos no han sido capaces de resistir la compra de conciencia favorecida por la renta petrolera. Venezuela ha sido el demonio corruptor del nuevo milenio.
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De entre los máximos responsables por esta obra verdaderamente apocalíptica, imposible obviar a la comadrona del estupro, al capo de la estirpe, al padrino de esta saga, al cabeza viva de los Corleone venezolanos, JV Rangel. Vale la pena consignar el juicio que le fuera abierto a José Vicente Rangel Cárdenas, su padre, con ocasión de los Juicios de Responsabilidad Civil y Administrativa incoados en 1945: "Cursa en los autos el libelo de demanda incoada por el ciudadano Cruz Ramírez Contreras, procurador General del Estado, con fecha 12 de junio de 1936, por ante el ciudadano Juez de primera Instancia en lo Civil y Mercantil del Estado. En dicho documento se revela el cuerpo entero, la personalidad del indiciado y su moral administrativa al frente de aquella entidad federal. Dice así: '…durante su administración, con respecto al manejo del Erario Público del Estado, aparece un déficit por lo correspondiente al Ramo de Papel Sellado del Estado, e igualmente, se anota la falta de un camión de volquete adquirido para las Obras Públicas y de cuatro carretas con sus correspondientes bestias; además el mencionado Mandatario dispuso de varios materiales de la casa de Gobierno en ruinas, de esta ciudad, para dedicarlos a la fabricación de una casa de su propiedad particular en esa misma población. Tales materiales son, ocho ventanas con sus correspondientes volados de hierro; una cantidad considerable de tejas, lumbres y otras maderas también del mismo edificio, lo cual entro a especificar en la forma siguiente, con sus valores determinados: Primero.- Diferencia por entrada de Papel Sellado en el año de mil novecientos treinta y cinco, según lo demuestra el documento que presento en un folio útil, etc., etc., etc.". De todo lo cual la sentencia termina por determinar los montos irregularmente apropiados y la pena a ser establecida.
No alcanzaron sus bienes a cubrir los costos de los bienes saqueados. Ni tienen las dimensiones apocalípticas de los que su hijo y su nieto han alcanzado a acumular pisoteando todo sentido de la moral pública. Ni muchísimo menos los miles y miles de millones de dólares que bajo la satrapía del personaje que Rangel encumbró al poder han sido arrebatados del tesoro público para satisfacer la avaricia de la banda de facinerosos que le cayera a saco a la mayor fortuna jamás habida en toda la historia de la República. Solo en regalos - forma directa de saqueo para satisfacer la gula de castristas, montoneros, tupamaros, farianos, elenos, cocaleros, sandinistas, lulistas, kirchneristas y comunistas latinoamericanos de todo pelaje - se calcula la estrambótica cifra de 160 mil millones de dólares. Las fortunas arrebatadas al erario público que hoy llenan las bóvedas de bancos europeos y asiáticos, incluso norteamericanos, a nombre de generales, almirantes, comandantes, capitanes y funcionarios chavistas como Aristóbulo Istúriz y Diosdado Cabello - que de muertos de hambre se convirtieran en nombre del pueblo, en multimillonarios - se elevaría a la cifra de sesenta mil millones de dólares.
Quienes nos criamos en la mayor pobreza y supimos honrar la decencia eclesial de la izquierda latinoamericana en cuyo ejemplo nos educáramos para el servicio público, debemos rendirnos a la evidencia del estupro y la inmoralidad en que ha caído prostituida por el insólito poder desintegrador de la corruptocracia chavista. Un triste, un lamentable aporte a la historia de su infamia.
E-mail: sanchezgarciacaracas@gmail.com
Twitter: @sangarccs
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