La procesión del pueblo
El Nacional 1 DE ABRIL 2015 - 00:01
No hay tarea más agotadora que aprovechar el asueto de la Semana Santa para ir al encuentro de los familiares que viven en el interior de la República, madrugando para hacer unas largas colas en esos pandemóniums de terminales, comprando pasajes al triple del precio regulado y enterrarse después en esos autobuses, bajo bultos y bolsas de productos de primera necesidad que escasean en los pueblos, donde el problema del desabastecimiento, como se sabe, es mucho más grave que en la ciudad capital y por ello tienen que llevar el alimento para toda la semana. Los éxodos de ahora producen, irremediablemente, una larga “corte de los milagros”. Esos hombres y mujeres humildes, que salen del inhóspito paisaje urbano, el lugar donde cumplen las obras y trabajos, donde se ganan el pan nuestro de cada día, sufren varios calvarios, no solo al ir tras los productos de primera necesidad, desperdiciando horas productivas haciendo colas en los Mercal y Bicentenario para obtener un kilo de leche en polvo, dos bolsas de Harina Pan o dos kilos de azúcar, todos racionados; a esos Cristos urbanos les esperan más humillaciones al salir al encuentro con los suyos, no solo en las lentas y desesperantes hileras de carros que se forman en las terribles carreteras trasmutadas en guillotinas, sino al tener que enfrentarse al abuso de poder, incluso al atraco de efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, que requisan en las alcabalas con mucha mala fe y tratan como “bachaqueros” a cualquiera que lleve el sustento a su casa.
Entonces, obligados por la circunstancias yantes que los dejen sin el pote de leche ni los pañales, se bajan de la mula para no tener que llegar a su destino impotentes, indignados y con las manos vacías. Un verdadero viacrucis. El drástico racionamiento del consumo implantado por el gobierno, con todo tipo de controles, está degenerando en hábito y ha condenado a los venezolanos a una feroz lucha por la vida, desde su fase más primitiva: la alimentación. La población está condenada a morirse de hambre. Maduro anda como un indigente, pidiendo a gobiernos aliados que envíen alimentos. “El bueno” de Evo se va a desprender de parte de sus reservas de leche en polvo para devolvernos algunos favores. La vida del ciudadano común y corriente es de grandes privaciones. En Venezuela hay ganas de comer y de consumir todo aquello que el gobierno no considera indispensable proporcionar al pueblo. Además de comida, verdad y libertad para conocerla.
Transición pacífica
Cuando el comunismo de estilo soviético -en el que se basaba la revolución cubana y ahora en la revolución bolivariana- se volvió una fuerza trasnochada, su mayor enemigo ha sido y es la libertad. Maduro, que es el caso que nos concierne, se ha convertido en el gran cancerbero del pueblo venezolano, eso lo entienden los demócratas en el mundo, por eso el ex presidente del gobierno español, Felipe González, en un gesto que lo enaltece como estadista anuncia que abogara por la defensa de los presos políticos, empezando por el alcalde metropolitano Antonio Ledezma y el líder de Voluntad Popular, Leopoldo López. González vendrá junto al ex presidente chileno Ricardo Lagos y el ex mandatario brasileño Fernando Henrique Cardoso. Las gestiones políticas de esos líderes en la crisis venezolana significarán el comienzo para la ansiada transición pacífica. ¡Apúntenlo!
Tic tac
Guerra psicológica: la campaña de rumores sobre niños secuestrados en Petare ha sido fraguada en Cuba, para responsabilizar al alcalde Carlos Ocariz. Según la fuente, tienen todo el montaje listo para meterlo preso después de Semana Santa.
"Para mí la Semana Santa es la época más bonita del año"
Amalia Amaya tiene más de medio siglo celebrando la Semana Mayor
"Creo que antes vivíamos más religiosamente" GUSTAVO BANDRES
JAVIER BRASSESCO | EL UNIVERSAL
lunes 30 de marzo de 2015 12:00 AM
Amalia Amaya tenía solo diez años la primera vez que hizo la peregrinación en la madrugada del Miércoles Santo desde Catia hasta la iglesia Santa Teresa.
Aunque ya ha transcurrido medio siglo de aquella iniciación, todavía hoy sigue cumpliendo religiosamente (nunca mejor dicho) no solo ese ritual sino todos los que están ligados a la Semana Mayor.
Para ella es el tiempo de lo sagrado: "Es algo muy bonito para los que tenemos fe, la época más bonita del año porque expresa la vida, pasión y muerte de Jesucristo. Es además el tiempo de compartir, de fraternizar, es algo mucho más trascendental que unos días de vacaciones".
Para ella las actividades de Semana Santa comienzan el sábado, cuando teje las palmas que un grupo de feligreses busca en La Guaira y que ella coloca en el altar y también entrega en varios sectores de Catia el Domingo de Ramos: "Antes el padre llegaba en burro desde la parroquia de Los Frailes hasta San Benito, pero hace como dos años el burro se murió".
El lunes y el martes de confesión comparte en la parroquia de Los Frailes con unos jóvenes que entonan cantos religiosos, y a las doce de la medianoche, apenas comienza el miércoles, parte junto a otros cuarenta fieles desde Catia hasta la iglesia de Santa Teresa para escuchar la misa de la una de la madrugada, la Misa de Nazareno.
Se regresa a arreglar el Nazareno para la procesión que tiene lugar después de la misa de las seis de la mañana y el jueves de fraternidad cuando se reparten los oficios en la parroquia, a ella le toca hacer los arreglos florales. Ese día todos los feligreses almuerzan juntos en la iglesia.
El viernes hace unos rezos por el Viacrucis y es también la hora de escuchar la misa de las Siete Palabras, y en la madrugada reciben el Sábado de Gloria cantando el pregón pascual y los salmos. El domingo cierra con la misa de resurrección.
Dice que no sabría explicar su vida sin hablar de la Semana Santa, aunque siente que ésta ha cambiado mucho en Caracas: "Creo que antes vivíamos más religiosamente, era una época que tenía un valor mayor para las personas. Ahora hay más religiones y también más apatía. Pero depende de nosotros los creyentes el que esta tradición pueda resucitar".
Aunque ya ha transcurrido medio siglo de aquella iniciación, todavía hoy sigue cumpliendo religiosamente (nunca mejor dicho) no solo ese ritual sino todos los que están ligados a la Semana Mayor.
Para ella es el tiempo de lo sagrado: "Es algo muy bonito para los que tenemos fe, la época más bonita del año porque expresa la vida, pasión y muerte de Jesucristo. Es además el tiempo de compartir, de fraternizar, es algo mucho más trascendental que unos días de vacaciones".
Para ella las actividades de Semana Santa comienzan el sábado, cuando teje las palmas que un grupo de feligreses busca en La Guaira y que ella coloca en el altar y también entrega en varios sectores de Catia el Domingo de Ramos: "Antes el padre llegaba en burro desde la parroquia de Los Frailes hasta San Benito, pero hace como dos años el burro se murió".
El lunes y el martes de confesión comparte en la parroquia de Los Frailes con unos jóvenes que entonan cantos religiosos, y a las doce de la medianoche, apenas comienza el miércoles, parte junto a otros cuarenta fieles desde Catia hasta la iglesia de Santa Teresa para escuchar la misa de la una de la madrugada, la Misa de Nazareno.
Se regresa a arreglar el Nazareno para la procesión que tiene lugar después de la misa de las seis de la mañana y el jueves de fraternidad cuando se reparten los oficios en la parroquia, a ella le toca hacer los arreglos florales. Ese día todos los feligreses almuerzan juntos en la iglesia.
El viernes hace unos rezos por el Viacrucis y es también la hora de escuchar la misa de las Siete Palabras, y en la madrugada reciben el Sábado de Gloria cantando el pregón pascual y los salmos. El domingo cierra con la misa de resurrección.
Dice que no sabría explicar su vida sin hablar de la Semana Santa, aunque siente que ésta ha cambiado mucho en Caracas: "Creo que antes vivíamos más religiosamente, era una época que tenía un valor mayor para las personas. Ahora hay más religiones y también más apatía. Pero depende de nosotros los creyentes el que esta tradición pueda resucitar".
Esperan más de 3.000 orquídeas en la Basílica Santa Teresa
La Basílica de Santa Teresa realizan todos los preparativos para la celebración de la Semana Santa
Las apreciadas flores comenzaron a llegar al santuario desde el sábado (Georgina Svieykowsky)
EL UNIVERSAL
domingo 29 de marzo de 2015 02:30 PM
Caracas.- Este Domingo de Ramos, día que conmemora la entrada de Jesús en Jerusalén, se llevan a cabo las misas y bendición de palmas, a las 12 del mediodía y a las cinco de la tarde, en la Basílica Santa Teresa, ubicada en El Silencio, Caracas, como inicio de la conmemoración de la Semana Santa.
A partir del lunes santo, los fieles podrán llevar las acostumbradas orquídeas para decorar el Nazareno de San Pablo, imagen que data del siglo XVI.
El sacristán Ángel Ramírez indicó que este año esperan superar las 3.000 orquídeas recibidas en el año 2014, destacó AVN.
Las misas oficiadas por obispos y sacerdotes invitados comenzarán el miércoles, día de la procesión, a las 12 de la medianoche y se realizarán cada hora. Al finalizar la misa de las cuatro de la tarde, la procesión del Nazareno saldrá de la Basílica en dirección a la esquina Cipreses, en la avenida Lecuna, y continuará por la avenida Baralt hasta regresar al templo.
El jueves santo está programada una misa para las nueve de la mañana, el santo rosario a las tres de la tarde y la misa de la cena del Señor a las 4:30 de la tarde.
El sermón de las siete palabras se hará a las 11 de la mañana del viernes santo, el vía crucis a las 2:30 de la tarde, la conmemoración de la pasión del Señor a las 4:00 de la tarde y la procesión del santo sepulcro a las 6:00 de la tarde.
El vicario parroquial Robin Zambrano advirtió que de acuerdo a la fe católica este día debe guardarse ayuno y abstinencia, norma que exime a mayores de 65 años.
Para cerrar la celebración de la Semana Mayor, el sábado se realizará la vigila a las 6:30 de la tarde y el domingo de pascua, cuando se festeja la resurrección de Cristo, se hará la última misa a las 10:30 de la mañana.
Por otra parte, Zambrano señaló que está prohibido llevar velas encendidas, a propósito del incidente ocurrido en 1952, donde hubo 50 personas fallecidas.
Asimismo, recomendó evitar llevar niños debido a las aglomeraciones que se forman.
Un 9 de abril de 1952 durante una misa de los días santos, una persona se alarmó ante la llamarada que produjo el roce del velo de una feligresa con una vela encendida, y a su voz de sobresalto "¡Incendio!", los presentes comenzaron a correr tratando de escapar del templo.
La estampida, sumada al estancamiento de personas en las puertas de la Basílica que se encontraban cerradas, dejó como resultado la asfixia y el aplastamiento de decenas de personas.
A partir del lunes santo, los fieles podrán llevar las acostumbradas orquídeas para decorar el Nazareno de San Pablo, imagen que data del siglo XVI.
El sacristán Ángel Ramírez indicó que este año esperan superar las 3.000 orquídeas recibidas en el año 2014, destacó AVN.
Las misas oficiadas por obispos y sacerdotes invitados comenzarán el miércoles, día de la procesión, a las 12 de la medianoche y se realizarán cada hora. Al finalizar la misa de las cuatro de la tarde, la procesión del Nazareno saldrá de la Basílica en dirección a la esquina Cipreses, en la avenida Lecuna, y continuará por la avenida Baralt hasta regresar al templo.
El jueves santo está programada una misa para las nueve de la mañana, el santo rosario a las tres de la tarde y la misa de la cena del Señor a las 4:30 de la tarde.
El sermón de las siete palabras se hará a las 11 de la mañana del viernes santo, el vía crucis a las 2:30 de la tarde, la conmemoración de la pasión del Señor a las 4:00 de la tarde y la procesión del santo sepulcro a las 6:00 de la tarde.
El vicario parroquial Robin Zambrano advirtió que de acuerdo a la fe católica este día debe guardarse ayuno y abstinencia, norma que exime a mayores de 65 años.
Para cerrar la celebración de la Semana Mayor, el sábado se realizará la vigila a las 6:30 de la tarde y el domingo de pascua, cuando se festeja la resurrección de Cristo, se hará la última misa a las 10:30 de la mañana.
Por otra parte, Zambrano señaló que está prohibido llevar velas encendidas, a propósito del incidente ocurrido en 1952, donde hubo 50 personas fallecidas.
Asimismo, recomendó evitar llevar niños debido a las aglomeraciones que se forman.
Un 9 de abril de 1952 durante una misa de los días santos, una persona se alarmó ante la llamarada que produjo el roce del velo de una feligresa con una vela encendida, y a su voz de sobresalto "¡Incendio!", los presentes comenzaron a correr tratando de escapar del templo.
La estampida, sumada al estancamiento de personas en las puertas de la Basílica que se encontraban cerradas, dejó como resultado la asfixia y el aplastamiento de decenas de personas.
Custodios de imágenes renuevan su fe cada año
Más de 5 mil orquídeas adornarán la imagen del Nazareno.
El grupo que adorna el Nazareno trabajó para que hoy la imagen esté adornada G. SVIEYKOWSKY
DELIA MENESES | EL UNIVERSAL
martes 31 de marzo de 2015 07:53 AM
Lina Méndez y sus dos hijas llevaron ayer una orquídea a la iglesia de Santa Teresa. Fue su contribución para adornar la imagen del Nazareno, que saldrá en procesión a las 5 p.m. de este miércoles. Así iban llegando las flores lilas, graneaditas.
"Están muy costosas, cada orquídea la venden en Bs 200, o tres por 500", detalló Méndez. "Han ido llegando, pero el año pasado a esta hora teníamos muchas más. La gente hace lo que puede", comentó una de las mujeres que recibía y ordenaba las flores.
Para Abraham Núñez, ni los precios ni la escasez, le restarán brillo al Nazareno. El encargado de adornar la imagen desde hace 16 años afirma que, como ya es habitual, más de 5 mil orquídeas se colocarán alrededor de la figura del Cristo.
Núñez lidera un grupo de 60 personas que se encarga de arreglar la imagen. "Hoy (lunes) vamos a trabajar durante toda la noche, no dormimos. Los últimos toques se los damos el martes. Esto es algo que te llena espiritualmente, en estos días estamos más cerca de Dios y le dedicamos más tiempo, algunos piden permiso en su trabajo y otros toman vacaciones", explicó Núñez, quien llegó a Santa Teresa para pagar una promesa por la culminación de sus estudios.
En el casco de Petare ayer a las 6 p.m. se cumplió el ritual de la liberación del preso. Durante el día, Magaly Linares, seguía una tradición de más de 200 años, que inició su bisabuelo, Norberto Arocha.
Acompañada de su familia, Linares decoraba la imagen de Jesús en la columna, de la que son custodios. "Compramos cuatro ramos, margaritas blancas y moradas. Las rosas no se consiguen, pero nos donaron dos docenas en pago de una promesa. Los feligreses colaboran con las flores y mi familia estará a cargo de esta imagen hasta que Dios nos dé salud.
Jesús en la columna es el santo de los presos, por eso en la procesión que salió ayer a las 7 p.m. pagaron sus promesas los que estuvieron en la cárcel y sus madres, algunos fueron con las manos atadas.
La procesión más larga de las que organizan en Petare es la del Nazareno, porque baja a la avenida Francisco de Miranda, puede durar más de 5 horas y hay quienes hacen el recorrido arrodillados. Ayer, Miguel Salas arreglaba la imagen del Cristo con la cruz a cuestas, ya le cambió el traje, pues cada Semana Santa estrena uno. En el templo también estaba Francisca Machado, custodia de la imagen de Humildad y Paciencia desde hace más de 40 años. "Esto lo hacemos con mucha fe y devoción para Dios, que es el centro de nuestras vidas".
Néstor Seijas y Amelia Rodríguez no consiguen los lirios ni las gladiolas que necesitan para decorar el Santo Sepulcro y el Monumento al Santísimo. "Estamos llamando a varios sitios. Por los costos tuvimos que reducir la cantidad de flores que usamos. En enero, por las fiestas patronales de Petare el gasto en flores fue de Bs 64.800".
A pesar de esto, el dinero que invierten no es un peso, lo hacen con gusto para mantener la tradición, dar testimonio de Cristo y renovar la fe cada año.
"Están muy costosas, cada orquídea la venden en Bs 200, o tres por 500", detalló Méndez. "Han ido llegando, pero el año pasado a esta hora teníamos muchas más. La gente hace lo que puede", comentó una de las mujeres que recibía y ordenaba las flores.
Para Abraham Núñez, ni los precios ni la escasez, le restarán brillo al Nazareno. El encargado de adornar la imagen desde hace 16 años afirma que, como ya es habitual, más de 5 mil orquídeas se colocarán alrededor de la figura del Cristo.
Núñez lidera un grupo de 60 personas que se encarga de arreglar la imagen. "Hoy (lunes) vamos a trabajar durante toda la noche, no dormimos. Los últimos toques se los damos el martes. Esto es algo que te llena espiritualmente, en estos días estamos más cerca de Dios y le dedicamos más tiempo, algunos piden permiso en su trabajo y otros toman vacaciones", explicó Núñez, quien llegó a Santa Teresa para pagar una promesa por la culminación de sus estudios.
En el casco de Petare ayer a las 6 p.m. se cumplió el ritual de la liberación del preso. Durante el día, Magaly Linares, seguía una tradición de más de 200 años, que inició su bisabuelo, Norberto Arocha.
Acompañada de su familia, Linares decoraba la imagen de Jesús en la columna, de la que son custodios. "Compramos cuatro ramos, margaritas blancas y moradas. Las rosas no se consiguen, pero nos donaron dos docenas en pago de una promesa. Los feligreses colaboran con las flores y mi familia estará a cargo de esta imagen hasta que Dios nos dé salud.
Jesús en la columna es el santo de los presos, por eso en la procesión que salió ayer a las 7 p.m. pagaron sus promesas los que estuvieron en la cárcel y sus madres, algunos fueron con las manos atadas.
La procesión más larga de las que organizan en Petare es la del Nazareno, porque baja a la avenida Francisco de Miranda, puede durar más de 5 horas y hay quienes hacen el recorrido arrodillados. Ayer, Miguel Salas arreglaba la imagen del Cristo con la cruz a cuestas, ya le cambió el traje, pues cada Semana Santa estrena uno. En el templo también estaba Francisca Machado, custodia de la imagen de Humildad y Paciencia desde hace más de 40 años. "Esto lo hacemos con mucha fe y devoción para Dios, que es el centro de nuestras vidas".
Néstor Seijas y Amelia Rodríguez no consiguen los lirios ni las gladiolas que necesitan para decorar el Santo Sepulcro y el Monumento al Santísimo. "Estamos llamando a varios sitios. Por los costos tuvimos que reducir la cantidad de flores que usamos. En enero, por las fiestas patronales de Petare el gasto en flores fue de Bs 64.800".
A pesar de esto, el dinero que invierten no es un peso, lo hacen con gusto para mantener la tradición, dar testimonio de Cristo y renovar la fe cada año.
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