POR MI MADRE: LA PAVA QUE CAMINA

Chicchan
Kin del Dia:

Serpiente Cristal Roja

Me dedico con el fin de sobrevivir
Universalizando el instinto
Sello el almacén de la fuerza vital
Con el tono cristal de la cooperación
Me guía el poder de la navegaciónFecha de las 13 lunas: Luna 3 dia 16
Fecha Gregoriana: Octubre 5, 2011

martes 4 de octubre de 2011

POR MI MADRE: LA PAVA QUE CAMINA

Hay quienes juran que la ola de calamidades públicas, que se ha registrado en días recientes, no es obra del imperio ni obedece a acciones de los paramilitares, esos subversivos que sólo el ministro El Aissami logra detectar pero no los atrapa. En verdad, el asunto es extraño. Aviones, trenes, ferris, cualquier bicho que ruede o vuele, cae bajo los influjos de esta pava bolivariana que... alerta, alerta, alerta que camina...

BOLÍVAR SUERTUDO

PABLO PÉREZ TRANQUILO EN LA PASTORA

El pasado sábado el precandidato Pablo Pérez hizo un recorrido por Lídice y el Manicomio, donde comprobó que dejó de ser territorio chavista.

Hace seis años, Manuel Rosales no podía entrar en esas zonas sin recibir algún tipo de agresión.

Hoy las cosas han cambiado. La mayoría de la gente recibió al gobernador zuliano con el mejor talante y con respeto. Los extremistas del PSUV se han ido reduciendo, pues las ejecutorias gubernamentales les quitan oxígeno. Los vecinos que observaron a Pérez están convencidos, una buena parte de ellos, que del gobierno de Chacumbele no hay nada que esperar, por lo que prefieren ir conociendo a alguno que lo pueda sustituir. Lídice el Manicomio y La Pastora, en su conjunto, dejaron de ser territorio rojo rojito. La convivencia entre quienes piensan distinto se impuso.

¿ES UNA DICTADURA, MI CAPITÁN?

Se quejan los viajeros por la nueva modalidad de alcabalas que aplica la Guardia Nacional en el trayecto que va de San Fernando de Apure a San Juan de los Morros. Bajo órdenes de un capitán que se siente dueño del lugar, los funcionarios hacen bajar tanto a los conductores particulares como a pasajeros de los autobuses, les piden sus documentos y tras un tedioso "chequeo" con una central, que a los afectados les parece teatro, llaman a los ciudadanos por nombre y apellido, les entregan sus papeles y les dicen que se pueden marchar. Dicen que el lunes, un viejo dirigente adeco, molesto por este abuso, le preguntó al oficial si ya habían implantado la dictadura.