Razón del nombre del blog

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El por qué del título de este blog . Según Gregorio Magno, San Benito se encontraba cada año con su hermana Escolástica. Al caer la noche, volvía a su monasterio. Esta vez, su hermana insistió en que se quedara con ella,y él se negó. Ella oró con lágrimas, y Dios la escuchó. Se desató un aguacero tan violento que nadie pudo salir afuera. A regañadientes, Benito se quedó. Asi la mujer fue más poderosa que el varón, ya que, "Dios es amor" (1Juan 4,16),y pudo más porque amó más” (Lucas 7,47).San Benito y Santa Escolástica cenando en el momento que se da el milagro que narra el Papa Gregorio Magno. Fresco en el Monasterio "Santo Speco" en Subiaco" (Italia)

viernes, 14 de octubre de 2011

viernes 14 de octubre de 2011

LA CONSULTA ASTROLÓGICA

    
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Por Cristina Laird
Muy a menudo la gente me pregunta, “qué me puede dar la lectura de la carta astral?” “Que puedo sacar de una consulta astrológica?”
Esto es un poco como preguntarse, qué puedo sacar de la visita al médico?

Las posibles respuestas serían: enterarme qué pasa conmigo? causa de mi dolor? o mi malestar,  mi pesar.
La diferencia es que de la consulta con un astrólogo, no salimos con una receta, para que podamos ir a la farmacia, comprar la medicina, ingerirla y calmar el dolor, sin realmente enterarnos el porqué del dolor, el origen de él o como prevenir que no vuelva a ocurrir.
La receta, en la consulta astrológica, es la comprensión del origen de nuestro dolor, para luego poder trabajar sobre ello, y así evitar volver a caer en las mismas circunstancias  que causaron el dolor al principio. Pero el trabajo es nuestro. La medicina calma el síntoma, pero nunca llegamos a comprender el origen del dolor y así el síntoma vuelve una y otra vez.
Por sobre todas las cosas, la consulta astrológica es una relación entre el astrólogo y el cliente, que puede o no ocurrir en la primera visita, considerando que la duración de la misma es normalmente 1 hora y media. Si no ocurre esta mágica ósmosis entre los dos, entonces la frustración es grande para ambos, tanto para el astrólogo como para el cliente.
Pero por supuesto lo mismo ocurre con el médico que visitas por primera vez. En muchas ocasiones, en su afán de registrar toda tu información en el ordenador, el médico, practicamente ni te mira a los ojos en la consulta que posiblemente dura como mucho 20 minutos. Te vas con uno o muchos papeles, en la mano, con el resultado de tus pruebas, que a menudo dice “todo normal, junto a un nombre muy raro” y tu receta ( siempre), pero en ningún momento has averiguado qué es lo que realmente te pasa. A mí me ha pasado mucho esto, pues sufría de jaquecas y alergias, cosas de las que me he curado, pero sin la ayuda de la medicina tradicional.
En la consulta astrológica, casi siempre ocurre, esta conexión, pero para ello, uno debe ir a ella abierto de corazón y dispuesto a compartir con el astrólogo. El universo se encarga de que cuando eliges el astrólogo, aún sin saber cómo o porqué, seguramente has elegido bien.
Es importante al principio de la consulta, un momento de silencio, que puede ser de sólo un minuto, para que las energías se sintonicen y a veces ni eso, pues todo ocurre naturalmente.
Sería, aún así, imposible, comprender todas las posibilidades  de nuestra carta astral en una sesión.
Por tanto es vital concentrarse en un tema actual, para poder sacar el mayor beneficio posible de la sesión.
“Cuando nos duele el cuerpo, vamos al médico o al fisioterapeuta, pero cuando nos duele el alma, vamos al astrólogo” Por qué? Pues porque en la comprensión de nuestra conexión con el Cosmos, y el entendimiento de su magnífico orden, está el secreto de nuestro proceso interno.
Es justamente la desconexión con el Cosmos y el entendimiento de su orden, y la responsabilidad en nuestra felicidad (libre albedrío) los que nos ha llevado a esta sociedad medicada, con enfermedad mental en aumento, a pesar de tanto Prosac. Si estas drogas realmente funcionan, por qué estamos cada vez más desconectados de nosotros mismos, de nuestra historia y nuestro destino? Si pensamos que no hay nada que podamos hacer y confiamos nuestro destino a un médico o un psiquiatra o un astrólogo o una receta médica, hemos perdido todo nuestro poder interno y nuestra fortaleza. La consulta astrológica debería llevarnos a comprender nuestro destino, es decir,  las cosas que podemos cambiar y las que no, para poder aceptarlo y vivir nuestra vida de una forma más creativa y con más aceptación. La Aceptación es vital, para obtener Humildad y a través de ellas más Amor.
En el Cielo hay Orden, el ciclo de los planetas es casi perfecto y se puede medir. La Luna tiene un ciclo de 28 días, Júpiter de 12 años, Saturno de 29 años y así sucesivamente. Siempre. Ha sido así desde el principio de los tiempos.
Es en nuestra confusión emocional que no hay orden y el Orden es indispensable para la felicidad. A cuanta más confusión, más infelicidad.
Los seres humanos desde sus principios han buscado respuesta en el orden del Cosmos y para los que trabajamos con ello, con buenísimos resultados. Aún así debemos recordar que en una vida y en muchas generaciones, los planetas nunca están igual, pues el gran reloj cósmico es imparable y los planetas nunca se encuentran en la misma posisión debido a la difencia de velocidad en la que se desplazan.
Si tomamos en consideración que Plutón lleva unos 245 años en darle la vuelta al sol, entonces comprenderemos que en una vida, nunca experimentamos la vuelta completa de este planeta en nuestra carta astral.
Esto a su vez, nos convierte en seres únicos, en el sentido de que nunca hay dos cartas astrales iguales. A veces el sólo reconocimiento de este hecho, es iluminante.
No hay ninguna vida igual a la nuestra. Somos únicos y es aquí donde la astrología se separa de la medicina, también. Un hígado humano, es un hígado humano. Pero como seres íntegros, teniendo en cuenta el cuerpo, el alma y el espíritu,  no hay dos seres iguales. Culturalmente podemos ser iguales, los italianos piensan que la pasta es lo mejor que hay, los españoles piensan que el  jamón serrano y el aceite de oliva, es lo mejor que hay, los orientales piensan que el arroz es lo mejor que puedes comer, pero como individuos, no somos iguales a nadie. Y la prueba de ello está justamente en la carta astral.
Es por eso que tanto el cliente como el astrólogo deben iniciar la sesión con la mente abierta. No hay dos Mercurio en cuadratura a Saturno iguales, aunque los arquetipos se compartan.
Aún así a pesar de las diferencias, todos tenemos a Saturno, Mercurio, Venus, Marte, etc en la carta astral, por tanto, hay “algo” que compartimos, que nos une, además del hígado.
A medida que Marte se adentra en Leo, los otros signos fijos, Tauro, Acuario y Escorpio, se ven afectados particularmente, con situaciones tensas, con mucha irritabilidad, alergias, el cuerpo pica, la mente también y sobre todo parece como si el mundo estuviese en contra de ellos. Cómo si una fuerza desconocida les volviese más impacientes y más cabreados y a veces sin aparente causa.
Convierte esta energía en positivo y levántate del sillón y vé a caminar, a correr, al gimnasio, a ejercitar tu cuerpo, muévete más y por sobre todo, anímate a ir detrás de tus sueños y tus aspiraciones, pues es justamente Marte que nos levanta de la cama y nos impulsa a vivir!
Si te sientes identificado por este último párrafo, comenta en este espacio. Gracias.
Para una lectura de la carta astral conmigo debes ir a mi página web:  http://www.astrologiaarquetipica.com y luego a Lecturas Privadas y seguir los pasos indicados.
Fuente Astrologia Arquetipica

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