"La otra orilla 2011" alcanza 7º edición
El Grupo Editorial Norma y la Asociación para la Promoción de las Artes (Proartes), convocan a la séptima edición del premio de novela "La otra orilla 2011". Este premio pretende promocionar a escritores de habla hispana, a través de una novela inédita, con la que quieran contribuir al enriquecimiento del patrimonio cultural escrito. Podrán enviar sus novelas al Premio de Novela "La otra orilla", escritores mayores de 18 años, sea cual sea su nacionalidad, siempre que se ajusten a las bases, las cuales pueden consultar por http://www.librerianorma.com; mercadeo.venezuela@carvajal.com.ve. En Venezuela las obras pueden remitirse con el encabezamiento Premio de Novela "La otra orilla 2011", en su sede Grupo Norma, calle 8 edificio Lance, piso 2 urbanización La Urbina -Postal 1050- Caracas.Además, para despertar el interés por los libros y estimular el hábito a la lectura, la Editorial Norma a través de la Feria del Libro de la Universidad de Carabobo, donó una colección de 150 textos, a cinco escuelas primarias en Valencia. El acto se realizó en los espacios del andén de la casona del rectorado de la UC, al que asistieron Rosa María Tovar, directora de Medios y Publicaciones de la UC y Quisis García, representante de la Editorial Norma, quien comentó que están convencidos de que se ha desvirtuado el verdadero valor de los libros.
Agregó que esta casa editorial está abierta a continuar otorgando sus obras literarias en pro de multiplicar la importancia de la lectura. (BM)
El Carabobeño 17 mayo 2011
bmacias@el-carabobeno.com
Las enfermedades cardiovasculares representan la primera causa de muerte en nuestro país para la población adulta y afectan un gran número de niños con malformaciones congénitas del corazón.
Muchos de ellos pueden sobrevivir o alargar su vida si son sometidos oportunamente a una cirugía de corazón abierto. Sin embargo, el ambiente socioeconómico en el que se encuentra Venezuela no le brinda las más mínimas posibilidades a la mayoría de estas personas que carecen de recursos económicos para someterse a tan costosa intervención.
En abril de 1992 nace en Valencia, estado Carabobo la Fundación de Ayuda al Paciente Cardioquirúrgico, Asociación Civil sin fines de lucro, que preside Máximo Guida, director-médico.
Comenta el especialista que a través de estos años, junto a un grupo de profesionales hace frente a esta necesidad, con el apoyo de instituciones hospitalarias y científicas.
Una opción válida
Hoy nos ocupa un nuevo caso exitoso, logrado por Fundacardio, pionero en técnicas de avanzada en la cirugía cardíaca latinoamericana, al realizar por primera vez en nuestra región este tipo de intervención, y que abre una nueva ventana científica que permitirá beneficiar a un gran número de pacientes mayores de 65 años de edad.
Un nuevo conducto con válvula protésica biológica (Biovalsalva) ha sido recientemente introducido en la práctica quirúrgica con el fin de ofrecer una opción válida para los pacientes ancianos sometidos a reemplazo de material compuesto de la raíz aórtica.
La cirugía cardíaca es una intervención bastante compleja, descrita por primera vez en 1968 por los doctores Hugh Bentall y Antony De Bono en Inglaterra, para reemplazar la arteria aorta desde su salida del corazón, incluyendo la sustitución de la válvula aórtica y la conexión de los orificios de origen de ambas arterias coronarias a entubo de material sintético que ocupa el lugar de la arteria original del paciente.
Por lo general este tipo de operación se hace a enfermos que tienen dilataciones severas de la aorta ascendente; esto es, del trayecto inicial de la arteria más importante del organismo, o que presentan un tipo de enfermedad denominado Marfan, en la cual, aun cuando la dilatación no sea muy severa, hay riesgo de que la aorta se rompa por debilidad en su pared, detalló Máximo Guida, presidente de la Fundación de Ayuda al Paciente Cardioquirúrgico.
Rogaban por una esperanza
Carmen Teresa Boscán, a sus 78 años de edad, procedente del estado Táchira, era portadora de una severa dilatación de la arteria aorta, a la salida del corazón de 7,5 cm de diámetro e insuficiencia de dos válvulas cardíacas, la aórtica y la mitral.
Su familia rogaba por una esperanza, la cual buscaron durante meses en diversos centros asistenciales públicos y privados del país. Pero fue en Valencia donde al consultar al cardiólogo Máximo Guida y a su equipo quirúrgico de la Fundacardio, la encontraron y gracias a ello, hoy día la paciente recuperó su salud.
Explica el cardiólogo, que para efectuar esta intervención es necesario detener completamente el corazón y utilizar un aparato que lo sustituya junto con los pulmones llamada Máquina de Circulación Extracorpórea, por lo cual el paciente permanece en vida artificial en este período, que puede durar entre una hora y media y dos horas.
-En nuestra paciente, además, fue necesario reparar la válvula mitral que se encontraba afectada por el tiempo en que había permanecido enferma sin ser operada oportunamente, citó.
Lo novedoso
Guida señaló que lo novedoso es la utilización de una nueva prótesis producida en Escocia, que contiene un material biológico que trata de reproducir las características de la válvula nativa del paciente y de la raíz de la aorta, la cual se conoce con el nombre de Biovalsalva, con lo cual se intenta hacer que sea más compatible y se adapte a la anatomía original.
Con estas características, por un lado, el funcionamiento de la misma es superior a las existentes actualmente en el mercado, y por el otro, se evita tener que suministrar anticoagulantes al paciente por el resto de su vida, que en algunas ocasiones puede producir efectos colaterales o complicaciones graves, aseveró.
Anteriormente, -comparó- si se quería evitar esto, había que "fabricar" en la sala operatoria un modelo similar suturando una válvula biológica a un tubo de los que se utilizan para la cirugía vascular, lo cual, por supuesto, no ofrece las mismas ventajas de este nuevo producto.
Cerca de 1.500 casos
Se estima la incidencia de esta patología en alrededor de 50 por un millón de habitantes por año, lo cual en nuestro país arrojaría un total de 1.500 aproximadamente, pero por diversas razones, económicas principalmente, en la actualidad existen pocos centros que realizan la Cirugía de Bentall, y el número no llega ni siquiera a 100 por año, por lo tanto.
Es aquí donde Fundacardio juega un papel importante, y cuya situación demanda que se hagan esfuerzos conjuntos entre las instituciones gubernamentales y privadas para atacar el problema, ya que ésta es una cirugía que le permite al paciente sobrevivir muchos años, mientras que si no se opera a tiempo, es mortal en el 100% de los casos, advirtió el especialista.
En el caso de Carmen Teresa Boscán, Fundacardio permitió que pudiera ser intervenida a bajos costos, mediante un acuerdo que mantiene con el centro privado Hospital Metropolitano del Norte de Naguanagua y las distintas unidades médicas que allí se encuentran, conscientes de la responsabilidad social con estos enfermos de escasos recursos.
-Es importante destacar -añadió- que los recursos con los cuales se pagan los costos de estas intervenciones, también son gestionados por el equipo administrativo de la fundación, los cuales están dedicados conjuntamente con los familiares de los pacientes a esta labor muy difícil que requiere a veces meses de paciencia para obtener resultados positivos.
Realizado primer implante de prótesis cardíaca Biovalsalva
Basyl Macíasbmacias@el-carabobeno.com
Las enfermedades cardiovasculares representan la primera causa de muerte en nuestro país para la población adulta y afectan un gran número de niños con malformaciones congénitas del corazón.
Muchos de ellos pueden sobrevivir o alargar su vida si son sometidos oportunamente a una cirugía de corazón abierto. Sin embargo, el ambiente socioeconómico en el que se encuentra Venezuela no le brinda las más mínimas posibilidades a la mayoría de estas personas que carecen de recursos económicos para someterse a tan costosa intervención.
En abril de 1992 nace en Valencia, estado Carabobo la Fundación de Ayuda al Paciente Cardioquirúrgico, Asociación Civil sin fines de lucro, que preside Máximo Guida, director-médico.
Comenta el especialista que a través de estos años, junto a un grupo de profesionales hace frente a esta necesidad, con el apoyo de instituciones hospitalarias y científicas.
Una opción válida
Hoy nos ocupa un nuevo caso exitoso, logrado por Fundacardio, pionero en técnicas de avanzada en la cirugía cardíaca latinoamericana, al realizar por primera vez en nuestra región este tipo de intervención, y que abre una nueva ventana científica que permitirá beneficiar a un gran número de pacientes mayores de 65 años de edad.
Un nuevo conducto con válvula protésica biológica (Biovalsalva) ha sido recientemente introducido en la práctica quirúrgica con el fin de ofrecer una opción válida para los pacientes ancianos sometidos a reemplazo de material compuesto de la raíz aórtica.
La cirugía cardíaca es una intervención bastante compleja, descrita por primera vez en 1968 por los doctores Hugh Bentall y Antony De Bono en Inglaterra, para reemplazar la arteria aorta desde su salida del corazón, incluyendo la sustitución de la válvula aórtica y la conexión de los orificios de origen de ambas arterias coronarias a entubo de material sintético que ocupa el lugar de la arteria original del paciente.
Por lo general este tipo de operación se hace a enfermos que tienen dilataciones severas de la aorta ascendente; esto es, del trayecto inicial de la arteria más importante del organismo, o que presentan un tipo de enfermedad denominado Marfan, en la cual, aun cuando la dilatación no sea muy severa, hay riesgo de que la aorta se rompa por debilidad en su pared, detalló Máximo Guida, presidente de la Fundación de Ayuda al Paciente Cardioquirúrgico.
Rogaban por una esperanza
Carmen Teresa Boscán, a sus 78 años de edad, procedente del estado Táchira, era portadora de una severa dilatación de la arteria aorta, a la salida del corazón de 7,5 cm de diámetro e insuficiencia de dos válvulas cardíacas, la aórtica y la mitral.
Su familia rogaba por una esperanza, la cual buscaron durante meses en diversos centros asistenciales públicos y privados del país. Pero fue en Valencia donde al consultar al cardiólogo Máximo Guida y a su equipo quirúrgico de la Fundacardio, la encontraron y gracias a ello, hoy día la paciente recuperó su salud.
Explica el cardiólogo, que para efectuar esta intervención es necesario detener completamente el corazón y utilizar un aparato que lo sustituya junto con los pulmones llamada Máquina de Circulación Extracorpórea, por lo cual el paciente permanece en vida artificial en este período, que puede durar entre una hora y media y dos horas.
-En nuestra paciente, además, fue necesario reparar la válvula mitral que se encontraba afectada por el tiempo en que había permanecido enferma sin ser operada oportunamente, citó.
Lo novedoso
Guida señaló que lo novedoso es la utilización de una nueva prótesis producida en Escocia, que contiene un material biológico que trata de reproducir las características de la válvula nativa del paciente y de la raíz de la aorta, la cual se conoce con el nombre de Biovalsalva, con lo cual se intenta hacer que sea más compatible y se adapte a la anatomía original.
Con estas características, por un lado, el funcionamiento de la misma es superior a las existentes actualmente en el mercado, y por el otro, se evita tener que suministrar anticoagulantes al paciente por el resto de su vida, que en algunas ocasiones puede producir efectos colaterales o complicaciones graves, aseveró.
Anteriormente, -comparó- si se quería evitar esto, había que "fabricar" en la sala operatoria un modelo similar suturando una válvula biológica a un tubo de los que se utilizan para la cirugía vascular, lo cual, por supuesto, no ofrece las mismas ventajas de este nuevo producto.
Cerca de 1.500 casos
Se estima la incidencia de esta patología en alrededor de 50 por un millón de habitantes por año, lo cual en nuestro país arrojaría un total de 1.500 aproximadamente, pero por diversas razones, económicas principalmente, en la actualidad existen pocos centros que realizan la Cirugía de Bentall, y el número no llega ni siquiera a 100 por año, por lo tanto.
Es aquí donde Fundacardio juega un papel importante, y cuya situación demanda que se hagan esfuerzos conjuntos entre las instituciones gubernamentales y privadas para atacar el problema, ya que ésta es una cirugía que le permite al paciente sobrevivir muchos años, mientras que si no se opera a tiempo, es mortal en el 100% de los casos, advirtió el especialista.
En el caso de Carmen Teresa Boscán, Fundacardio permitió que pudiera ser intervenida a bajos costos, mediante un acuerdo que mantiene con el centro privado Hospital Metropolitano del Norte de Naguanagua y las distintas unidades médicas que allí se encuentran, conscientes de la responsabilidad social con estos enfermos de escasos recursos.
-Es importante destacar -añadió- que los recursos con los cuales se pagan los costos de estas intervenciones, también son gestionados por el equipo administrativo de la fundación, los cuales están dedicados conjuntamente con los familiares de los pacientes a esta labor muy difícil que requiere a veces meses de paciencia para obtener resultados positivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario