11 de Julio del 2012
Zola o el intelectual
El 13 de enero de 1898 se publicó en las paginas del diario francés L’Aurore el artículo más famoso de la historia del periodismo: “Yo acuso”. Su autor fue el gran escritor frances Ennle Zola, que, con el, entró en la polémica que sacudía a la sociedad francesa en relación con el caso Dreyfuss, el oficial judío que había sido acusado falsamente de alta traición, expulsado del ejército francés y encarcelado. El asunto había creado una profunda brecha entre el ejército y las derechas, por una parte, y
la izquierda radical, por otro. Zola estaba en aquel momento en la cumbre de su carrera como novelista y decidió ser algo más. Tomó partido por Dreyíuss y la izquierda, y se convirtió en el primer intelectual crítico en el sentido moderno del término.
Nacido en París en 1840, dedicó su vida a la literatura, entre otras cosas porque no consiguió aprobar el examen final del bachillerato y no pudo estudio derecho, como pretendía. A lo largo de casi cuarenta años escribió un gran número de libros, cuyo núcleo lo forman las veinte novelas de la serie Los Rougon- Macquart, entre las que se encuentran algunas obras maestras de la literatura universal. Si diversos episodios de su vida fueron polémicos, tambiénlo fue su muerte. Zola falleció el 29 de septiembre de 1902 aslixiado por el óxido de carbono que emitía la chimenea de su dormitorio, cuyo tiro se encontraba obstruido. La policía ylos médicos manifestaron que había sido un desgraciado accidente. Pero se dijo también que la chimenea había sido preparada para que esto sucediera y que, por tanto, la muerte habría sido, en realidad, un asesinato. No tenemos, sin embargo, pruebes de ello. Zola había sido amenazado en diversas ocasiones y es evidente que hubo gente que recibió con satisfacción la noticia. Pero, seguramente, nunca sabremos si fue algo más que un accidente.
la izquierda radical, por otro. Zola estaba en aquel momento en la cumbre de su carrera como novelista y decidió ser algo más. Tomó partido por Dreyíuss y la izquierda, y se convirtió en el primer intelectual crítico en el sentido moderno del término.
Nacido en París en 1840, dedicó su vida a la literatura, entre otras cosas porque no consiguió aprobar el examen final del bachillerato y no pudo estudio derecho, como pretendía. A lo largo de casi cuarenta años escribió un gran número de libros, cuyo núcleo lo forman las veinte novelas de la serie Los Rougon- Macquart, entre las que se encuentran algunas obras maestras de la literatura universal. Si diversos episodios de su vida fueron polémicos, tambiénlo fue su muerte. Zola falleció el 29 de septiembre de 1902 aslixiado por el óxido de carbono que emitía la chimenea de su dormitorio, cuyo tiro se encontraba obstruido. La policía ylos médicos manifestaron que había sido un desgraciado accidente. Pero se dijo también que la chimenea había sido preparada para que esto sucediera y que, por tanto, la muerte habría sido, en realidad, un asesinato. No tenemos, sin embargo, pruebes de ello. Zola había sido amenazado en diversas ocasiones y es evidente que hubo gente que recibió con satisfacción la noticia. Pero, seguramente, nunca sabremos si fue algo más que un accidente.
La calidad de Zola como novelista es indiscutible. Me interesa hoy, sin embargo, subrayar otro aspecto: en más de un sentido este autor creó la figura del modernoin telectual de izquierdas comprometido, puesto al que han aspirado y aspiran multitud de escritores y profesores. Es cierto que pueden encontrarse ejemplos en épocas anteriores. Paul Johnson menciona a Roussean o a Shelley como antecedentes. Pero fue Zola quien definió los rasgos principales.
Papel protagonista
¿Qué es un intelectual? La verdad es que es una figura difícil de definir. Mientras su posición en el mundo anglosajón es poco relevante, en Francia desempeña un papel muy importante en el mundo de la cultura y la política. El intelectual suele ser un hombre de letras, que se supone que sabe de todo y opina sobre todo. Se considera a sí mismo la voz crítica de la sociedad. Y piensa que, sin él y otras personas como él, viviríamos en un mundo peor y más injusto.
Por ello tiene que tener ideas de izquierdas, aunque su vida nada tenga que ver con sus prédicas. Debe defender la solidaridad y la intervención del Estado en nuestras vidas, y criticar a la iglesia, a cuyos dirigentes, en el fondo, intenta sustituir como inspirador de conciencias humanas. De alguna forma, es el clérigo del mundo contemporáneo.., y se siente a gusto en ese papel. Aunque nunca imaginara lo que iba a suceder, Zola tiene su parte de culpa.
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