“En los próximos dos años el amor al poder comenzará a ser desplazado por el Poder del Amor. Llevará cierto tiempo, pero no lo duden porque ya está en movimiento. Comienza inicialmente en el interior de cada uno de sus corazones y Amados Seres, eso está sucediendo ahora”. Arcángel Metatrón
domingo 26 de diciembre de 2010
2011: El año de la transición
VENEZUELA: FIN DE UN CICLO
Sin duda alguna que Venezuela vivirá situaciones muy especiales dentro de este panorama mundial, y particularmente, pensamos que el actual sistema que rige al país, está llegando a su final, sin que esto signifique el regreso a modelos del pasado.
Desde este punto de vista, se presenta para nuestro país una gran incógnita, pues hasta el presente, la dirigencia de oposición que hay en Venezuela, no calza los puntos para cuadrar con la intensa energía de cambio que estarán generando Urano y Plutón. Hasta ahora, esta dirigencia se sigue moviendo bajo viejos esquemas que terminarán de ser barridos por la poderosa energía planetaria de cambio que está activa.
Asimismo, las estructuras políticas oficialistas viven un tiempo de desgaste, y pueden terminar de derrumbarse, para dar paso a una renovación a fondo. El asunto es que hasta el presente, existe una total incógnita sobre el nuevo liderazgo que está por surgir bajo la influencia de Urano en Aries.
Este nuevo liderazgo, con un nuevo modo de concebir la política, la ideología, la economía y lo social, puede provenir de cualquier parte: del oficialismo, de la oposición, de los “ni-ni”, y representará un verdadero “sacudón político” para nuestra nación.
Una fecha de referencia en los grandes cambios que habrá en Venezuela, es el 1º de julio, cuando se producirá una “cruz cósmica” planetaria de mucha fuerza.
Es muy probable que el derrumbe de las estructuras oficialistas venga dado por la insurgencia de su propia militancia, más que por la acción de la cúpula opositora, y a la vez, el pueblo opositor generará reacciones que estarán por encima de la dirigencia caduca.
La última vez que estuvo Urano en Aries, y al igual que ahora, con la compañía de Júpiter, fue en la época en que surgió en Venezuela la “generación del 28” que parió a los líderes que gobernarían el país entre 1945 (con un paréntesis dictatorial) hasta 1999. Al igual que entonces, un nuevo liderazgo está por nacer.
Por otra parte, Saturno en Libra, transitando por el ascendente de la carta astral de Venezuela, nos habla de un año duro, restrictivo, tanto desde el punto de vista económico como político, donde por una parte habrá mayores controles a la sociedad venezolana, pero a la vez, Urano con Júpiter, hará que la sociedad responda con mayor fuerza de irreverencia y rebeldía.
Cuando vivimos un momento de transición, es difícil que lo percibamos en toda su dimensión. Sólo el pasar del tiempo nos hace abrir los ojos. Esto está ocurriendo desde el pasado 26 de septiembre, que marca, astrológicamente hablando, el inicio de una nueva etapa histórica que debe pasar por una transición.
Astrológicamente está muy claramente demarcada esta transición, este nuevo ciclo que comienza. Para poder analizarlo, tenemos que remontarnos al inicio del ciclo histórico que estamos viviendo actualmente, que es el 4 de febrero de 1992, y comparar de alguna forma con lo que está pasando a partir del 26 de septiembre.
El 4 de febrero del 92, el punto del destino, el Nodo Lunar Norte, transitaba por Capricornio, a 7 grados de ese signo. El 26 de septiembre de este año, el Nodo transitaba por esta misma franja zodiacal, y también a 7 grados. Un ciclo exacto.
En Capricornio está la Luna de Venezuela (que representa al pueblo), y está el Nodo Norte de Chávez, que marca su misión. Astrológicamente, el 4 de febrero del 92 se inició una nueva etapa en Venezuela, que pasó por un proceso de transición.
En esa transición, surgió Chávez como potencial líder, y su intentona de golpe obtuvo un muy alto respaldo popular, y él, una gran popularidad. Gracias a esa acción militar ocurrieron cosas que de otra forma, no hubieran ocurrido.
De no haber sido por esa intentona, el presidente Carlos Andrés Pérez no hubiese sido destituido de la Presidencia de la República el 20 de mayo de 1993 por la Corte Suprema de Justicia; Rafael Caldera no hubiera logrado llegar a la Primera Magistratura ese mismo año, derrotando a AD y Copei, y el mismo Chávez no habría llegado al poder en 1998, marcando el fin de la llamada “cuarta república”.
Ahora estamos en el umbral de un nuevo ciclo histórico, mas no sabemos que nos va a deparar la transición de manera exacta; lo que podemos es prever que se acerca un tiempo de renovación, y un nuevo rumbo que habrá de tomar el país.
LA MISIÓN DE VIDA EN 2011
Los Nodos Lunares, que marcan la misión de vida tanto individual como colectiva, estarán en la mayor parte del año 2011, en los signos de Géminis y Sagitario, lo que presupone el nacimiento de nuevos modelos ideológicos, y una preponderancia de la discusión política y la acción legislativa.
Es de hacer notar que cada vez que los Nodos Lunares están en Géminis y Sagitario, en Venezuela ocurren importantes sucesos que mueven a cambios o generan hechos de impacto. Veamos.
En 1983 estuvieron los Nodos en Géminis y Sagitario y se produjo el célebre “Viernes negro”, que estremeció la economía venezolana y el estilo de vida de buena parte de la población.
En 1993, con los Nodos también en estos signos, es destituido el presidente Carlos Andrés Pérez, y por vez primera son derrotados AD y Copei en una elección presidencial, aún cuando quien los derrota es un líder del modelo bipartidista, como fue Rafael Caldera.
Y en 2002, con los Nodos también en Géminis y Sagitario, se producen la serie de sucesos de calle que generaron la breve salida del poder, del presidente Hugo Chávez Frías.
En 2011 nuestra misión de vida es romper paradigmas, abrirnos a nuevas ideas, dejar de lado el dogmatismo, tener la mente abierta a toda innovación. Este año también deberemos estar atentos con respecto a los medios de comunicación, porque estará activado el “karma” en esta materia, es decir, todo lo relacionado con la comunicación generará consecuencias de gran impacto.
EL AÑO DEL GATO
Por otra parte, tomando elementos de la astrología china, estaremos en 2011 en el “año del gato” o del “conejo”, que da flexibilidad favorable para los cambios. La última vez que hubo un “año del gato” fue en 1999, cuando en Venezuela tomó el poder Hugo Chávez, lo que representó el fin del sistema puntofijista.
En ese “año del gato”, también elegimos una Asamblea Constituyente que elaboró una nueva Carta Magna, la cual fue aprobada en diciembre de 1999.
Justo cuando estrenamos nueva Constitución en el 99, Júpiter y Saturno estaban juntos en la rueda zodiacal, indicando el nacimiento armónico de un nuevo modelo de país; ahora, en 2011, Júpiter y Saturno estarán enfrentados, indicando un tiempo de crisis, un año decisivo, para el rumbo de este modelo.
Será interesante ahora seguir con atención los hechos que generarán estas configuraciones planetarias en un año que se muestra como una transición hacia un nuevo modelo de sociedad.
Publicado por Pedro González Silva
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