Venezuela lleva arte subversivo a Venecia
El Colectivo de Artistas Urbanos Venezolanos muestra grafitis en la Bienal.
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El mural de Cristo armado será visto en Venecia (Fernando Sánchez)
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SIMÓN VILLAMIZAR | EL UNIVERSAL
jueves 25 de abril de 2013 08:34 AM
La historia parece repetirse. Si en 2011 Venezuela levantó una gran polvareda al mostrar en la Bienal de Arquitectura de Venecia cómo un grupo de personas se apropió del Centro Financiero Confinanzas y lo convirtió en un barrio vertical de 195 metros de altura y 45 pisos sin servicios garantizados de agua y luz eléctrica, rebautizado como "Torre de David", este año todo indica que las críticas se escucharán hasta en la ciudad de los canales.
El arte urbano. Una estética de la subversión. Así se llama la muestra que llevará Venezuela a la 55ª Exposición Internacional de Arte de la Bienal de Venecia, que estará abierta a los visitantes del mundo entero del 1° de junio al 24 de noviembre de este año.
Una muestra fotográfica que dará cuenta de los murales, grafitis o pintas callejeras, así como piezas de arte urbano, todos elaborados por personas afectas o vinculadas a la llamada "revolución socialista" emprendida por el presidente Hugo Chávez Frías en el año 1992, y agrupadas bajo el nombre de "Colectivo de Artistas Urbanos Venezolanos".
El Pabellón venezolano, que cuenta con la curaduría del artista visual y poeta Juan Calzadilla, además de la dirección o comisariato del director del Museo del Diseño y de la Estampa Carlos Cruz-Diez, Edgar Ernesto González, mostrará, por ejemplo, los polémicos murales que fueran pintados en la parroquia 23 de Enero de Caracas y que muestran imágenes de un Cristo armado con una ametralladora, así como algunas efigies de Ernesto "Ché" Guevara.
Una muestra que -al igual que la de los demás 88 países participantes- será expuesta en los Giardini della Biennale, esto es, en el espacio del Arsenale, comisariado en esta ocasión por el turinés Massimo Gioni.
Es en ese mismo espacio donde, han informado los productores de la Biennale Di Venezia,se realizarán además casi cuarenta "eventos colaterales" promovidos por diversas instituciones y esparcidos por toda la ciudad de los canales durante casi seis meses.
Considerado uno de los eventos artísticos más importantes del orbe, además de ser la vitrina ideal para hacer balance del estado de salud del arte contemporáneo, la Bienal de Venecia se ha caracterizado sobre todo en los últimos años por confrontar posiciones artísticas, ideológicas y estéticas muy diversas.
De hecho, se calcula que unas 440 mil personas -según cifras de la propia Bienal- visitaron en 2010 el encuentro artístico, que estableció así todo un récord de récord.
El León de Oro
El estudio venezolano Urban-Think Tank y el británico Justin McGuirk fueron galardonados el año pasado en la Bienal de Arquitectura de Venecia con el León de Oro al Mejor Proyecto, mientras que el pabellón de Japón logró el premio a la Mejor Participación Nacional en la edición número XIII de esa misma exposición internacional.
El jurado de la Bienal de Arquitectura concedió el León de Oro al Mejor Proyecto al británico Justin McGuirk y al estudio venezolano Urban Think Tank (Alfredo Brillenbourg y Hubert Klumpner), por su proyecto conjunto Torre David: gran horizonte, un libro que contiene imágenes y entrevistas con los arquitectos e ingenieros que participaron en la construcción del tercer rascacielos más alto de Venezuela, el Centro Financiero Confinanzas, más conocido como Torre David y que fue ocupado por unas 3.000 familias.
El León de Oro quiere reconocer "a los habitantes de Caracas y a sus familias, que han creado una nueva comunidad y una casa a partir de un edificio abandonado e incompleto", dijo en aquel entonces el jurado de la Bienal.
"El jurado elogia a los arquitectos por haber reconocido la potencia de este proyecto de transformación: una comunidad espontánea ha creado una nueva casa y una nueva identidad ocupando Torre David y lo ha hecho con talento y determinación", agregaron.
Mientras que el pabellón de Japón se alzó con el León de Oro a la Mejor Participación Nacional por su propuesta "¿Es posible la arquitectura aquí? Un hogar para todos", centrada en la capacidad del hombre para reponerse arquitectonicamente a las catástrofes naturales, justo un año después del terremoto y el tsunami que azotaron a ese país en marzo de 2011.
El arte urbano. Una estética de la subversión. Así se llama la muestra que llevará Venezuela a la 55ª Exposición Internacional de Arte de la Bienal de Venecia, que estará abierta a los visitantes del mundo entero del 1° de junio al 24 de noviembre de este año.
Una muestra fotográfica que dará cuenta de los murales, grafitis o pintas callejeras, así como piezas de arte urbano, todos elaborados por personas afectas o vinculadas a la llamada "revolución socialista" emprendida por el presidente Hugo Chávez Frías en el año 1992, y agrupadas bajo el nombre de "Colectivo de Artistas Urbanos Venezolanos".
El Pabellón venezolano, que cuenta con la curaduría del artista visual y poeta Juan Calzadilla, además de la dirección o comisariato del director del Museo del Diseño y de la Estampa Carlos Cruz-Diez, Edgar Ernesto González, mostrará, por ejemplo, los polémicos murales que fueran pintados en la parroquia 23 de Enero de Caracas y que muestran imágenes de un Cristo armado con una ametralladora, así como algunas efigies de Ernesto "Ché" Guevara.
Una muestra que -al igual que la de los demás 88 países participantes- será expuesta en los Giardini della Biennale, esto es, en el espacio del Arsenale, comisariado en esta ocasión por el turinés Massimo Gioni.
Es en ese mismo espacio donde, han informado los productores de la Biennale Di Venezia,se realizarán además casi cuarenta "eventos colaterales" promovidos por diversas instituciones y esparcidos por toda la ciudad de los canales durante casi seis meses.
Considerado uno de los eventos artísticos más importantes del orbe, además de ser la vitrina ideal para hacer balance del estado de salud del arte contemporáneo, la Bienal de Venecia se ha caracterizado sobre todo en los últimos años por confrontar posiciones artísticas, ideológicas y estéticas muy diversas.
De hecho, se calcula que unas 440 mil personas -según cifras de la propia Bienal- visitaron en 2010 el encuentro artístico, que estableció así todo un récord de récord.
El León de Oro
El estudio venezolano Urban-Think Tank y el británico Justin McGuirk fueron galardonados el año pasado en la Bienal de Arquitectura de Venecia con el León de Oro al Mejor Proyecto, mientras que el pabellón de Japón logró el premio a la Mejor Participación Nacional en la edición número XIII de esa misma exposición internacional.
El jurado de la Bienal de Arquitectura concedió el León de Oro al Mejor Proyecto al británico Justin McGuirk y al estudio venezolano Urban Think Tank (Alfredo Brillenbourg y Hubert Klumpner), por su proyecto conjunto Torre David: gran horizonte, un libro que contiene imágenes y entrevistas con los arquitectos e ingenieros que participaron en la construcción del tercer rascacielos más alto de Venezuela, el Centro Financiero Confinanzas, más conocido como Torre David y que fue ocupado por unas 3.000 familias.
El León de Oro quiere reconocer "a los habitantes de Caracas y a sus familias, que han creado una nueva comunidad y una casa a partir de un edificio abandonado e incompleto", dijo en aquel entonces el jurado de la Bienal.
"El jurado elogia a los arquitectos por haber reconocido la potencia de este proyecto de transformación: una comunidad espontánea ha creado una nueva casa y una nueva identidad ocupando Torre David y lo ha hecho con talento y determinación", agregaron.
Mientras que el pabellón de Japón se alzó con el León de Oro a la Mejor Participación Nacional por su propuesta "¿Es posible la arquitectura aquí? Un hogar para todos", centrada en la capacidad del hombre para reponerse arquitectonicamente a las catástrofes naturales, justo un año después del terremoto y el tsunami que azotaron a ese país en marzo de 2011.
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