jueves 6 de octubre de 2011
POR MI MADRE : SANTIFICADOS
En su afán de hacer campaña, en lugar de ponerse a resolver los problemas, el presidente Hugo Chávez se arrimó el pasado domingo a los motorizados para compadecerse con un sector al que calificó de "satanizado" por una sociedad que no los comprende y rechaza.
Es verdad que sobran los motorizados honestos y trabajadores, pero nadie puede negar que los hay también abusadores, irrespetuosos y a veces hasta cómplices de asaltos en la vía pública.
ARISTÓBULO DEVINO EN GOBIERNO
Qué tiempos aquellos cuando Aristóbulo Istúriz era el dirigente más importante del Sindicato Unitario del Magisterio. Era un aguerrido líder que peleaba con coraje porque las condiciones de trabajo de los educadores fueran las adecuadas. No le temblaba el pulso para convocar un paro o una huelga. Su actividad era intensa y nadie por ello lo acusó de estar involucrado en una conspiración para tumbar el gobierno. Las autoridades, en la mayoría de los casos, observaban esa lucha como algo normal en un país democrático. Ahora Istúriz ve las cosas de otra manera, desde otra posición. En estos días aseguró que los trabajadores que participen en protestas le están haciendo el juego al imperio y son cómplices de una conspiración para derrocar a Esteban. Qué decepción, como que se fumó una lumpia y devino en Gobierno.
MALETAS SIN ABRIR
Así será de visible el cordón umbilical del TSJ con Miraflores, que la presidenta de ese "poder autónomo" al parecer tenía previsto un viaje a Argentina para participar en algunos actos oficiales, y bastó la orden de Chacu para que doña Luisa suspendiera el vuelo, dejara las maletas sin hacer y se subiera al avión, formando parte de la comitiva que encabeza el "toero" Nicolás Maduro, que ahora juega beisbol, se reúne con los médicos, socorre a los enfermos y lanza discursos incendiarios en la ONU. En verdad, la cosa no le sale mal a la magistrada porque se trata de un viajecito exclusivo de 4 días, con estadía en hotel de primera clase y dólares de Cadivi para comprar recuerditos a los empleados tribunalicios, que están reclamando salarios atrasados.
SIN LINA NI RON
Algunos de los adeptos a la finada Lina Ron, que merodeaban todos los días por los alrededores de la esquina caliente, se cansaron de ser marginados por el chavismo gubernamental, y están dispuestos a respaldar una candidatura presidencial de la Mesa de Unidad, que todavía no se atreven a revelar. Advierten que el motivo de este apoyo no es que se hayan convertido en "opositores", sino que pretenden castigar al PSUV, de cuyo sectarismo se quejó muchas veces la extinta dirigente de UPV.
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