El Carabobeño 03 mayo 2012
Docentes pueden promover la conciencia ambiental. (Foto El Carabobeño)
Ecociudadanos, una vía para salvar al planeta
Docentes pueden promover la conciencia ambiental. (Foto El Carabobeño)
Gabriela Espinoza F. | gespinoza@el-carabobeno.com
Adoptar una visión más amplia sobre los problemas ambientales para enfrentar el acelerado deterioro de los recursos naturales, es una de las conductas que asumen los “ecociudadanos”.
Estos se diferencian de los “egociudadanos” que no ven más allá de sus propios intereses. La desinformación de las personas, que asumen actitudes apáticas hacia la conservación del ambiente, ha puesto en evidencia la explotación indiscriminada de los recursos naturales, durante las tres últimas décadas en Venezuela.
Para el director de Manejo Integral de Cuencas Hidrográficas de la Secretaría de Ordenación del Territorio, Ambiente y Recursos Naturales del Gobierno de Carabobo, Faruk Bagdah, uno de los problemas más comunes es el derroche diario de miles de litros por segundo de agua potable.
Aunque el 70% de la superficie del planeta está cubierta de agua, sólo el 3% es dulce, y menos del 1% del volumen total de los recursos del agua está al alcance del consumo humano.
De acuerdo a Bagdah la desigualdad en la distribución del agua potable es alarmante, pues 18% de la población mundial carece de acceso a este recurso, mientras que para otras 2.400 millones de personas no tienen un saneamiento adecuado.
La disposición inadecuada de los residuos sólidos que afectan de manera directa e indirecta ríos, embalses, lagos y el mar, son otros de los ejemplos de contaminación. Por ello, el director de Manejo Integral de Cuencas propone incentivar cambios de comportamiento de egociudadano al ecociudadano, para valorar los recursos naturales.
El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, señaló en el discurso de apertura de la 66ª sesión de la Asamblea General de esta organización, que las escuelas son el punto de partida para producir un cambio de actitud masiva sobre la conservación. “Todos los pueblos del mundo pueden transformar a los habitantes en ecociudadanos como vía para alcanzar el desarrollo sustentable”, acotó Faruk Bagdah.
A lo largo de los años, en el país han consolidado políticas públicas que van más allá de impartir un conocimiento. En el caso de Carabobo, la gobernación a través de la Secretaría de Ambiente y de Educación, estableció la enseñanza ambiental como una de sus estrategias más importantes.
Para promocionar procesos educativos de reflexión-acción, que formen “ecociudadanos”, desarrollaron el Proyecto Camoruco, con el que capacitaron a 638 docentes, y sensibilizaron a 6 mil 479 estudiantes. En el 2011, ejecutaron la “Guía de educación ambiental Carabobo” como herramienta de trabajo para escuelas y comunidades.
Ecociudadano:
En casa
* Reducir el consumo de energía eléctrica, apagar el televisor y las luces cuando no se necesiten.
* Cerrar la llave mientras se cepillan o se bañan, no descongelar las carnes con agua, y mantener las tuberías sin fugas. Un chorro abierto consume hasta 12 litros por minuto.
* Regar las plantas al atardecer o en la mañana, para evitar la evaporación rápida de agua y la no penetración efectiva en las raíces.
* Cerrar la llave mientras se cepillan o se bañan, no descongelar las carnes con agua, y mantener las tuberías sin fugas. Un chorro abierto consume hasta 12 litros por minuto.
* Regar las plantas al atardecer o en la mañana, para evitar la evaporación rápida de agua y la no penetración efectiva en las raíces.
En instituciones educativas
* Reutilizar el papel en las asignaturas.
* Educar sobre la importancia de ser un ecociudadano.
* Promover la siembra de árboles.
* Educar sobre la importancia de ser un ecociudadano.
* Promover la siembra de árboles.
En la oficina
* Evitar el consumo de vasos plásticos desechables.
* Reutilizar las hojas.
* Apagar los monitores y aires acondicionados cuando no se usen.
* Reutilizar las hojas.
* Apagar los monitores y aires acondicionados cuando no se usen.
En las comunidades
* Proteger las áreas verdes.
* Implementar en casa sistemas para captar las aguas de lluvia y usarlas en las labores del hogar.
* Llevar bolsas de basura cuando vayan al río, playa o montañas.
* Implementar en casa sistemas para captar las aguas de lluvia y usarlas en las labores del hogar.
* Llevar bolsas de basura cuando vayan al río, playa o montañas.
El Carabobeño 01 mayo 2012
Anaís Caldera Rodríguez || El planeta cambió
La tierra se ha transformado. Sus ciclos se trastocan cada día con los altos grados de contaminación atmosférica existentes, hasta el punto de que hoy ya ni los especialistas pueden determinar con exactitud cómo se expresará su comportamiento. El bióxido, el dióxido de carbono, los clorofluorocarbonos desprendido de las plantas generadoras de energía, a través del carbón; las chimeneas de las industrias petroleras y sus filiales, así como de los motores de los vehículos, constituyen los principales causantes de las mutaciones que viene sufriendo el planeta desde que la raza humana sobreexplota la naturaleza y desarrolla una actitud depredadora frente al ambiente por no contar con una cultura conservacionista.
El calentamiento global es la respuesta del planeta frente a esos desafueros humanos. La industrialización los absolvió con el uso excesivo de los combustibles fósiles para lograr un desarrollo no sostenible, por cuanto el proceso en sí o la mayoría de los productos usados para lograr la masificación de la producción desprenden gases altamente contaminantes que son vertidos a la atmósfera sin pudor alguno, razón por la cual cada década, la temperatura aumentará entre 0,3 y cinco por ciento. Esto significa, que el calor invade la tierra y frenará el seguimiento de la vida. Y si no lo impide, sólo continuará originando una serie de desastres naturales atentatorios del bienestar humano, animal y vegetal, como los prolongados veranos causantes de la escasez de agua, el descongelamiento de los glaciares, la destrucción de la capa de ozono; los huracanes, los ciclones, los terremotos y las inundaciones urbanas, rurales y costeras, producto de las severas lluvias y del aumento de los niveles del mar, respectivamente.
El calentamiento global también es el responsable de la aparición de nuevas plagas y enfermedades transmitidas por mosquitos, además de la extinción y migración de sus hábitat naturales de muchas especies animales y vegetales, así como de la muerte de ancianos y niños por el fuerte calor, el cambio abrupto y drástico de las características de muchos hábitat y ecosistemas, hasta convertirlos en espacios no productivos.
El planeta cambió. Un cambio no garante de la calidad de vida de ninguna especie viviente. No obstante, los abusos humanos sobre la naturaleza siguen. No hay respeto por las leyes naturales ni por la misma vida. Se celebran paulatinamente cumbres para tratar el tema del calentamiento global y no se cumplen a cabalidad los tratados suscritos. El Protocolo de Kioto continúa vigente y la tierra merece que las potencias bajen los niveles de contaminantes, porque de lo contrario la tierra sólo promete su explosión. Su Apocalipsis y ya no habrá más despertar ni más celebraciones por su día.
anaipab@hotmail.com | sinpalangre2009@gmail.com (*) Periodista
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